Lleida vibra con los actos de su fiesta mayor
El popular dragón de cartón piedra, que se ha convertido en icono de estas celebraciones, cumple 60 años en esta edición
Lleida se volcó ayer en los actos de la fiesta mayor con una respuesta multitudinaria de los ciudadanos, que tomaron la calle participando en los actos programados para honrar a Sant Anastasi. El seguici popular que lleva la imagen del patrón desde la catedral hasta la iglesia de Sant Joan tuvo una pequeña variación ya que un breve –pero intenso– aguacero hizo que la ofrenda floral tuviera que desarrollarse en el interior de la basílica. En paralelo, se abrió el Parc dels Somriures para los más pequeños, y los principales monumentos de la ciudad y museos abrieron sus puertas de forma gratuita. A la hora del vermut, el colectivo La Sirollada, que organiza una fiesta alternativa a la oficial, sirvió alcohol en el espacio de la plaza Blas Infante, a pesar de que la Paeria no había otorgado el correspondiente permiso. Por la tarde, la rambla Ferran fue el escenario de la tradicional batalla de flores con un participante muy especial, lo Marraco. El popular dragón de cartón piedra cumple sesenta años participando en los actos festivos, para alegría de los más pequeños y la nostalgia de los mayores. Ensamblado en un tractor, lo Marraco, es el tercero de su saga, desde que a principios del siglo pasado se incorporó a los iconos de la cultura popular, como gegants o el àliga. Hasta el domingo, Lleida vibra con verbenas y conciertos.