Roces entre la UE y Londres por los planes de defensa
El lanzamiento de misiones militares conjuntas se aplaza
Londres ha dejado de ser un freno para los planes de la Unión Europea de impulsar su defensa común autónoma respecto a la OTAN, pero su gestación empieza a verse lastrada por las tensiones que rodean a las negociaciones sobre el Brexit y la creciente ambición de sus socios por avanzar en este terreno.
La traducción del acuerdo político alcanzado en marzo a lenguaje jurídico ha provocado roces con el Gobierno de Theresa May, que acompaña su manifiesta voluntad de dejar avanzar a la UE con un estrecho marcaje a qué podrá hacer y qué no mientras el Reino Unido siga formando parte del club.
Londres ha presentado reservas a las conclusiones que los ministros de Exteriores y de Defensa europeos tienen previsto aprobar la próxima semana para crear una célula de planificación y mando de misiones militares no ejecutivas, operaciones que no implican el uso de la fuerza. Tras tan burocrática denominación se esconde lo que Alemania, Francia, España e Italia, entre otros países, esperan que sea el embrión de un cuartel general europeo encargado de coordinar misiones conjuntas. El nuevo órgano tendrá su sede en Bruselas y debería funcionar como comando central para poder tomar decisiones sobre misiones en marcha, como salidas fuera de área o refuerzos de personal, hoy inexistente.
En marzo se evitó deliberadamente el término cuartel general para evitar problemas con Londres, que considera que la denominación
Londres rechaza que al responsable de la nueva célula de planificación militar se le llame comandante
y sus atribuciones constituirían una duplicación respecto a la Alianza Atlántica. La UE ha pactado revisar el modelo antes de que Londres abandone el club para determinar si hace falta reforzar este marco. La pelea ahora está en cómo denominar a su máximo responsable, si simplemente director o si se va un paso más allá y se le llama comandante, como se está intentando desde Bruselas. Londres se opuso el viernes, en la reunión de embajadores del Comité Político y de Seguridad de la UE, a que se use el segundo término.
“Nos estamos saltando el acuerdo de marzo”, advierten fuentes comunitarias que rechazan que se pueda acusar a Londres de torpedear el acuerdo, como en cambio hacen otras fuentes, que relacionan la actitud británica con las elecciones y las negociaciones del Brexit. Los contactos bilaterales han continuado durante el fin de semana para tratar de desbloquear la situación de cara a las reuniones de la próxima semana.
La actuación de Rusia en Ucrania, el Brexit y la elección de Donald Trump han actuado como catalizadores para la apuesta europea por la Defensa. El siguiente paso será el lanzamiento de misiones militares conjuntas, para conflictos de alta intensidad, mediante cooperaciones reforzadas. El plan era definir su contenido y aclarar qué países quieren participar en ellas en la cumbre de junio perola iniciativa acumula retraso. Ahora se aspira a que quede definida en otoño y a que se lance oficialmente en diciembre.