El juez de El Vendrell quiere que se investigue a Gordó por el 3%
El magistrado reitera la petición al TSJC sin informe de Anticorrupción
El titular del juzgado de instrucción número 1 de El Vendrell, Josep Boch, ha elevado una exposición razonada al Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) en la que solicita que se investigue al exconseller de Justícia, Germà Gordó, por el llamado caso del 3%. Así lo informó ayer el tribunal en una nota de prensa.
Esta es la segunda vez que el juez de El Vendrell eleva una petición contra Gordó al TSJC. La primera fue el pasado mes de febrero, y el tribunal la rechazó considerando que los indicios eran débiles. Ya en aquel momento el asunto le correspondió por reparto al magistrado Enric Anglada, quien quiso apartarse alegando su estrecha amistad con la también juez del tribunal Núria Bassols, cuyo marido está siendo investigado en este asunto. El TSJC denegó su solicitud y le encargó el caso. Semanas después, Bassols abandonó la sala Civil y Penal para pasar a la de Administrativo.
Por antecedentes ahora también le corresponde a Anglada estudiar el tema, informó el TSJC. Pero puede haber cambios, debido a que Enric Anglada se jubila a primeros del mes que viene y estos días disfruta de un permiso. De manera que el asunto recaerá en otro magistrado titular o uno de los que actúan como refuerzo de esta instancia.
Además, en esta ocasión la exposición de El Vendrell llega sin un informe de la Fiscalía Anticorrupción, que es la encargada de la investigación. De hecho, en este momento no está claro quién dirige las pesquisas. Desde prácticamente el inicio se encargaban los fiscales Fernando Bermejo y José Grinda, pero una de las decisiones tomadas por el nuevo jefe del departamento, Manuel Moix, fue apartarlos del caso, lo que ha provocado gran polémica hasta el punto de que el fiscal general del Estado, José Manuel Maza, anunció que será él quien adopte la decisión final, que en estos momentos está pendiente.
Cuando se produjo la primera exposición razonada, la Guardia Civil y la Fiscalía Anticorrupción señalaban en sus informes que Gordó actuó como intermediario en posibles operaciones irregulares con vistas al cobro de comisiones a cambio de concesiones de contratos públicos, y que otros acusados se referían a él con nombres claves como Gregorio o Gerardo.
Con posterioridad, se desarrolló una nueva fase de las diligencias, bautizada como operación Pika, parte de la cual sigue siendo secreta. En ella se vieron afectadas obras realizadas en Barcelona, como la plaza de las Glòries o los accesos al puerto.
Germà Gordó ha sido conseller de Justícia y secretario del Govern de la Generalitat. También fue gerente de CDC. Ahora es diputado en el Parlament y por eso tiene fuero ante el TSJC.
La Fiscalía y la Guardia Civil indican en sus documentos que el exconseller actuó como intermediario