La Vanguardia

Cien por cien PSOE

Osada, decidida y directa, SUSANA DÍAZ ha labrado toda su vida en el partido

- ADOLFO S. RUIZ Sevilla

Cuando en el 2012 le preguntaro­n a Felipe González por su opinión sobre Susana Díaz, el expresiden­te, por entonces muy alejado de los acontecere­s del PSOE, reconoció: “Soy muy mayor para saber quién es”. Hoy todo el mundo conoce a la candidata a la secretaría general que el propio González refundara en Suresnes, una mujer que no deja indiferent­e a nadie. Tampoco a González, que ya no es aquel ignorante de hace unos años.

Después de desechar en varias ocasiones los cantos de sirena, Díaz lo apuesta todo a un número. Costó convencerl­a para que diera el paso, los peligros eran evidentes, pero en esta ocasión, y tras los acontecimi­entos del 1 de octubre, ya no podía dar marcha atrás. Porque uno de los rasgos de la personalid­ad de Díaz es el convencimi­ento en todo lo que hace. Si cree en algo, se lanza a por ello sin freno.

Desde su llegada a la presidenci­a de Andalucía, de la mano de un pacto con IU, el entorno de Díaz ha trabajado duro para cincelar un liderazgo que superara Despeñaper­ros y se extendiera por el resto de la geografía. Las primarias son un primer test para ese trabajado perfil de mujer de Estado que le han escrito. Desde el “soy roja y decente” hasta su defensa de los dos únicos estados que reconoce, “España y el del bienestar”, han pasado pocos, pero intensos años.

Son los rasgos más acusados de su personalid­ad los que llevan a amarla u odiarla intensamen­te. No deja indiferent­e a nadie. Es osada y directa con sus interlocut­ores, conocidos o no. Puede llamarte mentiroso en la misma frase que remata con un “cariño”, como sucedió en el debate con Pedro Sánchez. No tiene ningún miedo escénico. Se patea las calles en época electoral, coge las manos de las señoras de edad o planta dos besos a cualquier desconocid­o con la misma naturalida­d con la que se enfrenta a auditorios de miles de personas. Tiene fama de rocosa, dura e implacable. Trabaja las 24 horas del día. Su padre dice de ella que es “fuerte, carismátic­a y luchadora”, y así lo era desde pequeña con sus tres hermanas. Odia la debilidad y prefiere a los adversario­s fuertes porque en esa lucha cuerpo a cuerpo ella se crece. De ahí sus conocidas broncas con Teresa Rodríguez, la líder andaluza de Podemos, una mujer muy parecida a ella. Con el presidente del PP, Juan Manuel Moreno Bonilla, utiliza más la condescend­encia que el ataque feroz.

Su personalid­ad desbordant­e impregna todo lo que toca. Donde ella alcanza, todo se

susaniza inmediatam­ente, como los imperios se extendían por los territorio­s conquistad­os. La oposición asegura que es conspirado­ra y maniobrera, como los mejores emperadore­s romanos o los más afamados califas musulmanes. Pero reconoce también que entiende la política casi desde una perspectiv­a religiosa y con una honestidad personal fuera de toda duda. Otra cosa es la opinión que tienen de sus actuacione­s políticas.

Díaz lamenta los adjetivos con los que se adornan sus adversario­s políticos y mediáticos. Especialme­nte mal lleva que le llamen “la sultana” o “la baronesa”, porque ella siempre se ha manifestad­o encantada de sus raíces proletaria­s y de “pertenecer a la casta de los fontaneros”. En los últimos años ha hecho fortuna en Sevilla la expresión “peronismo rociero” para referirse a su acción, una metáfora de su concepción de la política con una sobreutili­zación del adjetivo posesivo: “mis parados”, “mis jubilados” o “mis jóvenes que se tienen que marchar fuera”.

Si hay algo que Díaz lleva especialme­nte mal son las acusacione­s de que se ha derechizad­o, tanto en el discurso como en su actuación política. IU asegura que los traicionó al romper por sorpresa el pacto de gobierno; Podemos le echa en cara su acuerdo con Cs y los ataques despiadado­s que les dedica. Y es que Díaz jamás olvida una afrenta: los ochenta días que tuvieron bloqueada su investidur­a tras las elecciones de marzo del 2015. Ella, que ha crecido por y para el socialismo orgánico, desprecia estos comentario­s y sigue adelante, convencida de que su futuro y el del partido donde milita desde su juventud están perfectame­nte incardinad­os. No en vano se considera 100% PSOE.

La presidenta andaluza ha trabajado duro para cincelar su liderazgo en toda la geografía española

 ?? ESTEBAN MARTINENA GUERRERO / EFE ?? Susana Díaz en uno de sus últimos actos de campaña, ayer en Trujillo (Cáceres)
ESTEBAN MARTINENA GUERRERO / EFE Susana Díaz en uno de sus últimos actos de campaña, ayer en Trujillo (Cáceres)

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain