Cuestión de confianza
#0 presenta ‘El puente’, un ‘reality’ sin nominaciones ni expulsados, que cuenta con Paula Vázquez como narradora
Quince desconocidos tendrán que trabajar unidos para construir, con sus propias manos y en un máximo de treinta días, un puente que les permita llegar a una isla ubicada a 300 metros, donde les espera una recompensa de 100.000 euros. Esa es la premisa de El puente, el nuevo programa que el canal #0 de Movistar+ estrenará el próximo lunes a las 22 horas y que supone el regreso de Paula Vázquez al medio televisivo en un registro poco habitual: el de narradora.
Producido por Movistar+ en colaboración con Zeppelin TV, este reality ofrece un formato innovador tanto en la forma, con una realización muy cuidada, como en el contenido, donde no existen ni nominaciones ni expulsiones, y donde serán los mismos participantes los que decidan quién es el ganador. Y este decidirá si comparte el premio, con quién y en qué proporción. La confianza será elemento clave en estas decisiones.
Álvaro Díaz, director general de Zeppelin TV, destaca que se ha querido hacer un aproximación al reality tradicional “de una manera totalmente distinta y novedosa” con este formato creado desde la productora, responsable también de Gran hermano. “Queríamos desde el principio ser originales en la forma de contarla e incluso de grabarla, que fuera distinto de lo visto en otros realities y que se parezca más a la narrativa de una serie de ficción”, señala.
Díaz explica que los participantes sólo sabían antes de empezar el programa “que iban a estar treinta días en la Patagonia argentina para participar en un reality que se emitiría en #0 y que podían optar a un premio de 100.000 euros”. Con esa única información viajan y hasta que no empieza el programa no descubren la mecánica del concurso. “Y eso lo cambia absolutamente todo”, apunta Díaz. Entonces saben que junto a 14 desconocidos deberán trabajar hombro con hombro para conseguir un objetivo común. “No es un programa de supervivencia, aunque es verdad que viven con lo justo y sin comodidades. Es un espacio de aventura, con el desafío de construir un puente entre quince personas que no tienen los conocimientos específicos”, apunta.
Cuando empiecen a trabajar se establecerán inevitablemente unas relaciones personales, con sus fobias,
feelings, amores y luchas por el liderazgo. “Eso es mucho de nuestro ADN”, remarca Díaz. Cuando se descubra la mecánica de cómo se gana el premio cambiarán las estrategias y alianzas entre ellos “porque no es lo mismo cuando sabes que tu sacrificio puede no servir para nada”.
En un principio el proyecto no plantea que hubiera ningún presentador, siguiendo esa línea de novedad. “Pero después nos apuntaron desde #0 la posibilidad de contar con Paula Vázquez y nos pareció bien”. Buscaron un rol diferente y nuevo para Paula y lo encontraron en forma de narradora y espectadora, que además es “la que va un paso por delante, la que pone las reglas del juego y la que sabe lo que va a pasar”.
Cuando recibió la propuesta, Paula aceptó de inmediato. “Cuando me estaban diciendo que se iba a rodar en Patagonia, yo ya estaba pidiendo un taxi”, dice entre risas. “Me enamoré del programa cuando me explicaron el formato y me dijeron qué imagen querían dar”, dice. “Creo que es el paso natural que tenían que dar los realities”. Ella es la narradora e hilo conductor del programa, y en ningún momento interactúa con los concursantes “a pesar de encontrarme a pocos metros de ellos. Soy una especia de espía que sobrevuela todo aquello”.