Ciudadanos no quiere hacer sangre con Díaz

Necesitaba cariño, y se lo dieron. Los parlamentarios socialistas andaluces y Juan Marín, líder de Ciudadanos, se reunieron ayer con Susana Díaz con idéntico resultado: las primarias socialistas son ya pasado y ahora toca poner los cinco sentidos en Andalucía, confirmar una estabilidad política que permita agotar la legislatura sin sobresaltos. Más calmada y relajada, la presidenta andaluza recibió la ovación prolongada de los parlamentarios socialistas, la primera tras el fiasco del fin de semana. “Fortalecer al PSOE andaluz porque es la mejor forma de fortalecer al partido en España”, fue el mensaje de Díaz, tras felicitar de nuevo a Pedro Sánchez, pronunciando su nombre. Ahora, que él solucione los problemas en Ferraz, mientras ella lidia en el palacio de San Telmo, donde se conoce al dedillo todos los rincones. No vaya a ser que se entre en una dinámica derrotista que pueda afectar al control socialista de la Junta. Antes de la reunión con los parlamentarios, Díaz también había recibido el afecto de Juan Marín, líder de Ciudadanos, quien saludó a los periodistas con un expresivo “no he venido a hacer sangre”. La formación naranja, por boca de Marín, manifestó su razonable satisfacción con el grado de cumplimiento del acuerdo con el PSOE, que cifró en un 66%, que “es un suficiente, pero queremos llegar al sobresaliente”. Avanzar en la reforma de la ley electoral andaluza y en la supresión de los aforamientos fueron los dos objetivos que Marín arrancó de Díaz.