Lo que da de sí Bach
El Bachcelona lanza propuestas inéditas y presenta al compositor con marimba, a ritmo de son, con dj a la carta, fundido en Gaudí...
Este verano el festival Bachcelona –del 9 al 25 de julio–, surgido del proyecto de cantatas Bach Zum Mitsingen, da una vuelta de tuerca a las perspectivas desde las que disfrutar del compositor de Leipzig y plantea, por ejemplo, escuchar su polifonía con las sonoridades de la marimba. O gozar de un concierto a la carta en el Palau Güell. O hacer dialogar su música con la de Shostakóvich o Britten. O aún más, dejarle, en fin, en manos de un dj.
Efectivamente, a iniciativas originales como el ciclo Bach Domèstic que se celebra en casas particulares de Barcelona, se añaden ahora propuestas rompedoras como dejar que el dj Sebastian haga el acompañamiento del clásico del cine mudo The wind, de Victor Sjöström, en la Filmoteca de Catalunya. “La idea es hacer transformaciones de sonido que permitan percibir las ideas compositivas de Bach pero con los medios electrónicos actuales”, comenta Gerard Erruz, dj Sebastian, quien protagonizará una de las tres propuestas del Bach en Imatges. Las otras dos son documentales sobre reconocidos conjuntos barrocos, como la Nederlandse Bachvereniging y el Ensemble Gli Angeli Genève, proyecciones a las que asistirán el director del primero, Jan van den Bossche, y el fundador del segundo, el bajo-barítono Stephan Macleod.
Pero vayamos por partes. Un primer planteamiento inédito ya tendrá lugar en la inauguración, con el Origen de la gran misa, una forma de conocer las cantatas que inspiraron a Bach para escribir su Misa en si menor. Los ganadores de la Beca Bach serán solistas en esta producción del festival, que contará con orquesta barroca y un coro de 80 personas dirigidos por Pau Jorquera, coorganizador del festival junto con Daniel Tarrida, quien se sentará al órgano.
“El festival no tiene miedo de ningún formato”, señaló Jorquera antes de desgranar el resto de la programación, que este año cuenta con grandes intérpretes: el propio Macleod dará un concierto de cámara en el recinto modernista de Sant Pau junto a la violinista Leila Schayegh y el clavecinista Bertrand Guillier. Y Ton Koopman, la estrella del festival que no ha querido perderse esta edición, ofrecerá un concierto para niños y una clase magistral para los solistas de la Beca Bach.
La marimba, protagonista en el Bachmosferes del Museu Marès, ha dado lugar a un ciclo propio, el Marimbach, en la que colabora el Museu de la Música: figuras como la coreana Miyoune Kim y el holandés Koen Plaetinck tocarán las Variaciones Goldberg. Y el divulgador musical Joan Vives descubrirá todo lo que hay en el museo relacionado con el compositor.
Bach dialogará con la modernidad en casas particulares y sonarán preludios y fugas de Shostakóvich, la Sonata para violín de Honegger y las Suites para chelo de Britten. La bailarina Lorena Nogal actuará con la cellista Amparo Lacruz y habrá fusión de música cubana y Bach a cargo del pianista Roberto Fonseca y su trío. Otro formato innovador será el concierto a la carta –el público votará– que dará en el Palau Güell de memoria el virtuoso organista Paolo Oreni en la propuesta Gaudint Bach (por lo de gozar y Gaudí).
Quince mil personas han asistido a las cinco ediciones del festival, que cuenta con un presupuesto de 60.000 euros, con un 16% de ayuda del Ayuntamiento, y cerca de un 30% de patrocinios.
Paolo Oreni tocará Bach a la carta en el Palau Güell de Gaudí, y Ton Koopman dará un concierto para niños