Calvario en bicicleta
Valverde y Contador ceden terreno en el temible Mont du Chat
Las expectativas abiertas por la buena contrarreloj de Alejandro Valverde y Alberto Contador se desvanecen en la primera etapa de montaña del Dauphiné, con la ascensión al Mont du Chat, un puerto de 1.504 metros de altura en el macizo del Jura del que salen triunfantes Richie Porte y Chris Froome.
Las expectativas abiertas por la buena contrarreloj de Alejandro Valverde y Alberto Contador se desvanecieron en la primera etapa de montaña del Dauphiné, con la ascensión al Mont du Chat, un puerto de 1.504 metros de altura en el macizo del Jura de donde salieron triunfantes Richie Porte, nuevo líder, y Chris Froome, el más valiente en los ataques del día. Porte tiene ahora 39 segundos de renta sobre Froome, mientras Valverde (cuarto de la general) está ya a más de un minuto y Contador (sexto), cerca de los dos.
La etapa de ayer en el Dauphiné tenía un valor especial. Los últimos cien kilómetros, desde Culoz pasando por los altos de Jongieux y del Chat, coincidían casi calcados con el tramo final de la novena etapa del Tour, que está programada para el 9 de julio. A un mes vista pues de uno de los días fundamentales de la Grande Boucle y tratándose además de un puerto rarísimo en el trazado de la carrera francesa (sólo se subió en 1974 y por cierto el mejor en la cima fue el cántabro Gonzalo Aja) el trazado de ayer tenía valor doble. El puerto es de alta dureza, posiblemente uno de los más difíciles del próximo Tour, y el rendimiento de Porte y Froome fue superior al de los dos jefes de filas españoles. Valverde quiso irse solo, pero el ritmo sostenido por detrás lo devolvió a la realidad. Contador perdió comba en la parte final, y de esta manera el paso por el Mont du Chat sonrió a Fabio Aru, seguido por Froome, Porte y Fuglsang a 11 segundos mientras Bardet, Valverde y Contador perdían 1m 3s.
El Mont du Chat promete espectáculo en el Tour y eso tanto en la subida como en la bajada. La que hizo Froome fue espectacular. Valverde también hizo de las suyas, pero Contador, que sufrió problemas, sin caer, en una curva cedió una pizca más de terreno. “Estoy muy contento por como van las cosas. Es cierto que hago una carrera conservadora, pero es lo que toca. No me preocupa este resultado”, dijo el ciclista de Pinto.
Porte se mantiene así como gran favorito del Dauphiné, pero sin menospreciar nada las opciones de un Froome que no parece superior en montaña, pero sí decidido a buscar el triunfo. Hoy toca una etapa de 168km con un final inédito: el Alpe d’Huez pero subiendo por detrás, por el col de Sarenne, y no por las 21 curvas famosas.