Cae un grupo yihadista con adiestramiento para atentar
Zoido compara el núcleo con los de Francia y el Reino Unido
La Policía detuvo ayer en Madrid a tres ciudadanos marroquíes relacionados con el Estado Islámico (EI). Uno de ellos está considerado por el Ministerio del Interior como especialmente peligroso, por sus contactos en las zonas de conflicto y por sus conocimientos en materia de armas y explosivos. El titular de Interior, Juan Ignacio Zoido, dijo respecto a este detenido que se trata de una persona “muy radicalizada” a quien se incautó “profunda y profusa documentación e instrucción” sobre dicha organización terrorista.
Las detenciones ponen de manifiesto el estado de alerta de las fuerzas policiales ante la amenaza del terrorismo islámico, que se cierne sobre toda Europa. La Policía informó de que la operación “se enmarca en la estrategia de la Comisaría General de Información para la rápida detección y neutralización de individuos muy radicalizados, paso previo a la comisión de actos terroristas”. En el caso de referencia, el principal detenido es Rachid el Omari, un ciudadano marroquí de 32 años a quien Interior considera como “una clara amenaza para la seguridad de nuestro país”. Las mismas fuentes añadieron que el apresado presenta un perfil “extremadamente peligroso”, coincidente con el de los terroristas recientemente implicados en los atentados cometidos en el Reino Unido y Francia.
La Policía indicó que Rachid el Omari estaba en posesión de gran cantidad de material formativo del Estado Islámico para cometer atentados, así como documentos para adoctrinar a nuevos potenciales terroristas. Estos manuales incluyen desde la preparación ideológica más radical hasta cuestiones técnicas sobre manejo de armas y explosivos, pasando por acciones de martirio. Las fuerzas de seguridad habían detectado contactos de este individuo, a través de las redes sociales, con miembros activos del EI ubicados en zonas de combate en Siria e Irak.
Junto al mencionado Rachid el Omari fueron detenidos Mohammed Chaou y Mustapha el Omari, de 33 y 38 años, respectivamente. Ambos convivían con el principal arrestado y estaban iniciándose en “las prácticas terroristas”, según las mencionadas fuentes policiales. Al respecto, dichas fuentes añadieron que, en su faceta de adoctrinamiento, el principal detenido pretendía captar a personas de su entorno para que llevaran a cabo “la yihad violenta” en España. Las mismas fuentes explicaron que el material del Estado Islámico que le fue incautado a Rachid el Omari le servía “tanto para preparar a los candidatos elegidos en aspectos religiosos radicales” como “en formación teórica y práctica en técnicas operativas”. La investigación se llevó a cabo bajo la autoridad de la Fiscalía de la Audiencia Nacional y su juzgado central de instrucción número 2. “En el desarrollo de la investigación y a través de las vigilancias efectuadas –añadieron fuentes del Ministerio del Interior– se pudieron detectar comportamientos y actitudes” por parte del principal detenido que “hicieron extremar las precauciones de los agentes”, hasta llevar a la desarticulación del grupo. Desde junio del 2015, en que se elevó al nivel 4 el grado de alerta antiterrorista, las fuerzas de seguridad han detenido a 172 presuntos terroristas. El número de detenidos se eleva a 217 si se cuenta desde comienzos de ese mismo año.
Desde el 2015 han sido detenidas en España 217 personas relacionadas con el terrorismo