La última de Alves
El brasileño rompe a las malas con el Juventus para irse al Manchester City
Genio y figura, Dani Alves también se marchará del Juventus por la puerta trasera, después de una temporada tan buena en lo deportivo como polémica por sus desplantes con los propios aficionados juventinos, algo que los seguidores del Barcelona conocen muy bien. A pesar de tener firmado un segundo año de contrato, a razón de cinco millones de euros, el lateral brasileño, de 34 años, llevaba semanas enviando guiños al Manchester City de Pep Guardiola. Todo indica que lo ha conseguido y que el Juventus le dará la carta de libertad, como ha confirmado Giuseppe Marotta, el consejero delegado del club turinés, quien en un encuentro esta semana con medios locales señaló: “Con Dani Alves no hubo una ruptura, pero las motivaciones son fundamentales para un futbolista. Mantener a un jugador que quiere irse no le sirve a nadie. Él quería una nueva experiencia, acordaremos una rescisión de contrato y le deseamos suerte”, dijo.
Las buenas palabras no ocultan los hechos. Desde la derrota en la final de Cardiff ante el Madrid el 3 de junio, Alves había prodigado una política de gestos inaceptable para el club que le paga: ha aconsejado a Paulo Dybala “que fiche por otro equipo si quiere mejorar más” y ha elogiado en público a Cristiano Ronaldo: “¿Creen que soy idiota o enfermo mental? No lo soy. ¿Creen que no sé que Cristiano es un fenómeno?”. La guinda del pastel la puso hace unos días, cuando colgó en su cuenta de Instagram una fotografía de las botas con las que ganó la Champions del 2015 en Berlín, cuando jugaba con el Barcelona y precisamente ¡ante el Juventus! Bajo la foto escribió el siguiente texto: “Paseando por casa, mirad qué he encontrado este domingo. ¡¡Saludos, chicos!!”.
La medicina que ha hecho probar Alves a los tifossi juventinos la conocen bien los seguidores azulgrana, donde estuvo ocho temporadas en las que se convirtió en uno de los mejores –si no el mejor– lateral derecho del mundo. Todo ello no impidió que el jugador se despidiera del club con malos modos: “Los directivos del Barcelona fueron falsos y desagradecidos. Irme gratis del Barça fue una hostia con clase”, dijo en una entrevista este febrero.
Los gestos feos y las recriminaciones de Alves al público del Camp Nou fueron varios a lo largo de aquellos años. Pero si algo dolió en particular a los seguidores culés fue el vídeo que colgó en las redes sociales el 16 de abril del 2016, tres días después de que su equipo fuera eliminado de la Champions por el Atlético en cuartos. Se grabó a sí mismo disfrazado con una peluca y, fingiendo la voz de una mujer (parodiaba a su novia, la modelo canaria Joana Sanz), decía: “Mucho ánimo porque está muy triste. Es un partido de fútbol, no pasa nada, la vida sigue. Tú vales mucho más que esto”. Después del revuelo, replicó: “Si vuestro descanso son mis lágrimas, vivirán cansados”. Otros vídeos de Alves fueron virales, pero ninguno tuvo la misma repercusión.
RESIGNADOS “Mantener a un jugador que quiere irse no le sirve a nadie; le deseamos suerte”, dice Marotta