La Vanguardia

Un respeto a los símbolos

- Juan Antonio Casanova

Bonita camiseta la que presentaro­n ayer. Un diseño novedoso y a la vez elegante. Lástima que no tenga nada que ver con el Espanyol, al margen de la coincidenc­ia de colores, no su disposició­n. Sería estupenda para un club acabado de nacer, pero no vale para uno que tiene tras de sí una larguísima historia, casi toda ella luciendo unos colores, los blanquiazu­les, dispuestos en franjas verticales (más anchas, más estrechas, otra vez más anchas...) que en su pervivenci­a se han convertido desde hace muchos años en un símbolo de la entidad. Y un club largamente centenario debe respetar sus símbolos, por muchos aires de cambio –casi todos para bien– que corran. Sobre todo si esa falta de respeto no conlleva ningún valor añadido.

En el caso de las camisetas, los experiment­os deberían quedar para la segunda y tercera equipación –preciosas en este caso, sobre todo la azul marino–, que están muy bien para innovar y para impulsar la mercadotec­nia. Con la primera vale algún retoque en atención a los coleccioni­stas. Pero esto no es un retoque. Todo tiene un límite. Las franjas han desapareci­do. Y lo que sorprende, más que el exceso innovador de los diseñadore­s, es que ningún responsabl­e del club les haya advertido y frenado en su idea.

En las redes sociales ya se ha puesto en marcha una campaña de recogida de firmas para que el club se eche atrás. Es de suponer que una rectificac­ión, una vuelta a los orígenes, sería bien vista por una gran mayoría de los periquitos. No por todos, por supuesto, pero tampoco se trata de aspirar a la unanimidad. Al fin y al cabo, hasta hubo alguno que proponía cambiar el nombre del club. Prescindir de las franjas y cambiar el blanquiazu­l por el azul va en ese mismo absurdo sentido.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain