La Vanguardia

“Hubiese pagado por tener el VAR”

El árbitro del Benito Villamarín admite que con la tecnología se habría evitado su error

- CARLES RUIPÉREZ Barcelona

Los árbitros en España son un colectivo cerrado, huraño y hermético. A veces, hasta casi monacal. Es como si hubiesen hecho voto de silencio. De hecho, esa omertà se la han impuesto ellos mismos, celosos de su intimidad. Como si mostrar cierta empatía equivalies­e a un síntoma de debilidad. Prefieren meter la cabeza dentro del caparazón para aislarse de las tormentas que origina el fútbol. Por eso, sorprende ver a tres colegiados de Primera conversand­o abiertamen­te sobre su profesión. Lo consiguió el programa El arbitraje desde dentro de Movistar, que reunió a Undiano Mallenco, Clos Gómez y Hernández Hernández. Y sorprende aún más como ellos mismos apoyan la llegada de la tecnología al fútbol.

No fue un grito de socorro, pero sí que, en un clima de distensión, un árbitro admitió sin tapujos los beneficios de la ayuda del videoarbit­raje. “Entre bromas siempre digo a mis amigos que yo hubiese pagado por tener el VAR allí”, confesó el canario Hernández Hernández, protagonis­ta de la jugada más bochornosa de la última Liga cuando no vio un gol del Barça en el Villamarín. El defensa bético Mandi despejó el balón cuando estaba medio metro dentro, algo que hubiese quedado claro bien con el ojo de halcón en la línea de gol o una breve consulta a una repetición.

“Era una jugada grotescame­nte clara. Ojalá pudiese volver atrás en el tiempo para acertar”, explica el colegiado, que se quedó “tocadísimo” cuando vio la imagen. Aunque también quiso defenderse. “Con tres jugadores por delante no lo pude ver, y el asistente, con dos por delante, tampoco. Era materialme­nte imposible”, reconoce el canario, que cataloga al Barcelona como “un equipo muy complicado para los asistentes por su juego impredecib­le, rápido y de tiralíneas”. Ante ese déficit de perspectiv­a del ojo humano, la tecnología haría más justo el fútbol.

El colectivo también es consciente de su hermetismo. “Sin duda los árbitros nos comunicamo­s lo mínimo. Pero es que no sé si sería mejor comunicarn­os más. Si hiciésemos una rueda de prensa después de un partido, las polémicas de un día y medio durarían una semana”, opina el aragonés Clos Gómez, el más desinhibid­o, ya que, tras pitar la final de Copa BarçaAlavé­s, se ha retirado. “A veces te alegras de que Diego Costa no juegue en la Liga, por todo lo que le hacen y lo que él hace”, señala.

Por su parte, el navarro Undiano Mallenco descubrió que los árbitros utilizan la plataforma Wyscout para preparar los partidos y prever jugadas. “Puedes ver cómo se colocan los jugadores en los últimos 15 córners que ha sacado un equipo”, revela, en un ejercicio de profesiona­lización, pero también de naturalida­d necesaria.

HERMETISMO DE AUTODEFENS­A “Los árbitros hablamos lo mínimo ya que si hiciésemos ruedas de prensa, las polémicas durarían más”

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RAÚL CARO / EFE Hernández Hernández no validó un claro gol del Barça en Sevilla

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