El Congreso reprobará a Montoro por la amnistía fiscal inconstitucional
El PP aduce que la trayectoria del ministro “es impecable” y el PNV se abstendrá
Segundo ministro que quedará reprobado en ocho meses de gobierno: la reprobación del Congreso de los Diputados al titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, no se votará hasta mañana, pero se debatió ayer y todos los grupos fijaron su postura, que arroja un resultado inequívoco: Montoro será reprobado a iniciativa del PSOE y con el apoyo de Unidos Podemos y sus confluencias, Ciudadanos, ERC, PDECat, Nueva Canarias y Bildu. El motivo que lleva a Montoro a engrosar la lista simbólica en que ya está Rafael Catalá, ministro de Justicia –reprobado por injerencias en la acción de la justicia y el cariz de la elección de fiscales–, es la amnistía fiscal del 2012, que el Constitucional derribó hace diez días, y que permitió la regularización de 40.000 millones de euros defraudados, con una carga impositiva del 3%.
Con la excepción del PNV –que no se siente concernido por una medida que no afectó al espacio fiscal vasco– y el único apoyo de PP y sus socios de UPN y Foro Asturias, el resto de grupos coinciden con el dictamen del Constitucional que considera que la regularización ideada por Montoro es en realidad un premio a los defraudadores y un castigo a los contribuyentes que cumplen con la hacienda pública. Para los grupos de oposición parlamentaria, la gravedad de la actuación de Montoro trasciende la formalidad legislativa, y lo convierte en un cómplice de los corruptos y defraudadores, al tiempo que otorga al Gobierno el dudoso honor de ser promotor de una operación de blanqueo. “Lo hicieron ustedes más barato que aquellos que blanquean”, subrayó la diputada de Esquerra Republicana Ester Capella. El diputado de Ciudadanos Vicente Ten Oliver, le reprochó a Montoro tanto el blanqueo de los 40.000 millones como la simultánea subida de impuestos y una modificación del código penal que protegía a “lo mejor de cada casa”, en su propia expresión. Ten Oliver no dejó de dirigirse a los socialistas para indicar que esta amnistía fiscal no es diferente de las aprobadas por gobiernos socialistas, salvo en que aquellas no fueron recurridas ante el Constitucional.
Varios fueron los diputados que leyeron pasajes de los duros términos de la sentencia del Constitucional, empezando por Julián López, en nombre del grupo socialista, quien subrayó que la operación de Montoro supuso que el Ministerio de Hacienda “abdicase de su obligación de hacer contribuir a todos en el sostenimiento del Estado”. En este sentido, López desautorizó el argumento empleado estos días por el Partido Popular, en el sentido de que la amnistía solo padece un defecto de forma, y subrayó que la sentencia tritura los argumentos de Montoro, tanto como la técnica legislativa del real decreto ley con el que se aprobó la amnistía.
Alberto Garzón, de Unidos Podemos, argumentó que la amnistía es coherente con una política económica de protección a las grandes fortunas: “La política económica del PP consiste en aceptar la desigualdad, y proponer facilidades para los que están en lo más alto, porque supuestamente crean riqueza”. También se detuvo en que en un par de meses la cantidad recaudada pasase de 50 millones a 1.000 millones: “Sólo tiene una explicación: que el ministerio y el PP se pusieron todo el verano a llamar por teléfono. Luego saben quiénes son y dónde están y legislan a su medida. Por eso, en vez de reprobar ministros, lo que hay que hacer “es echarlos”, concluyó aludiendo a la moción de censura.
Ana María Madrazo Díaz , del PP, aseguró por su parte que se pide la reprobación de Cristóbal Montoro precisamente porque “hace bien su trabajo” y aseguró que “su hoja de servicios es impecable”.
El PSOE dice que el TC tritura los argumentos del titular de Hacienda para defender la regularización fiscal