10 PASOS PARA CUIDAR TU ESPALDA
Las malas posturas, los gestos bruscos y la vida sedentaria perjudican a nuestra columna: haz el cambio.
1
Caminar erguido con la espalda recta y la cabeza un poco elevada. Es importante no sobrecargar los hombros hacia delante o hacia un lado por culpa de una bolsa demasiado pesada. Para encontrar la postura correcta, conviene ejercitarla delante de un espejo e interiorizarla.
2
No descansar demasiado en posición horizontal. Puede parecer paradójico, pero varios estudios han demostrados que las personas con dolores leves de espalda sufren más si permanecen constantemente en un estado de semirreposo. Por ello, mejor dormir ocho horas diarias y pasar a la acción el resto del tiempo.
3
Ojo con la báscula. Para que nuestra espalda no sufra demasiado, conviene vigilar la báscula y no coger sobrepeso, ya que esto provoca una mayor tensión en los músculos de la espalda. En el caso de las mujeres embarazadas, existen fajas específicas.
4
Aplicar calor. Existen en el mercado un sinfín de productos recomendables para el dolor leve de espalda, pero todos ellos parten del calor como remedio. Las mantas eléctricas, las bolsas de agua caliente y los sacos de semillas que se calientan en el microondas dan buenos resultados. Con 20 minutos en la zona dolorida, notaremos mejoría.
5
Coger peso de forma consciente y evitando gestos bruscos. Un buen truco es flexionar primero las rodillas o sentarse antes para no forzar la inclinación de la espalda. Ojo con coger peso de modo incorrecto repetidamente.
6
Fortalecer el centro de nuestro cuerpo gracias a ejercicios propios del yoga o el pilates, por ejemplo. Caminar, hacer ejercicios leves aeróbicos o nadar ayudarán a fortalecer los músculos que rodean nuestra columna vertebral y, por ello, se suavizarán los molestos dolores.
7
Recibe la energía del sol, que fortalece los huesos y te cargará de vitamina D, necesaria para aportar energía a la columna y mantener los huesos fuertes. Con tomar el sol de 10 a 20 minutos al día será más que suficiente.
8
Tacones, ni muy altos ni muy bajos. Son tan perjudiciales los tacones de 10-12 centímetros como los zapatos completamente planos. Se recomiendan las cuñas bajas, de alrededor de tres centímetros y, sobre todo, que se adapten bien a nuestro pie.
9
Frente al ordenador, no permanezcas mucho tiempo en una misma postura y fíjate bien en cómo te sientas. Cada 90 minutos levántate, estira las piernas y camina un poco. Para tareas domésticas, recurre a un sencillo taburete chato y apoya primero una pierna: lograrás aliviar tu espalda y que el peso pase a ellas de forma alterna.
10
Come sano y asegura la ingesta suficiente de alimentos frescos con alto contenido en calcio. Cuida tu alimentación incluyendo alimentos sin grasa, de alto contenido proteínico y abundantes frutas y verduras. Respeta la pirámide nutricional y bebe suficiente agua.