La Vanguardia

Un salario que permita vivir

Un barcelonés necesita 1.251 euros al mes para vivir dignamente, según Ksnet y D’Aleph

- BARCELONA Redacción

Un barcelonés que viva solo necesita 1.251 euros mensuales para vivir con dignidad. Una cifra ligerament­e superior a la que requeriría esta misma persona si viviera en alguno de los municipios del área metropolit­ana (1.182 euros). Por debajo de esas cifras, se considera que una persona está en riesgo de caer en situación de pobreza. “Vivir con dignidad” es un concepto resbaladiz­o, extremadam­ente subjetivo. Por eso se ha abierto camino el concepto de “salario de referencia” –también llamado “salario de vida”–, en el que se intentan computar los gastos mínimos que requieren los trabajador­es y sus familias.

“A diferencia de lo que ocurre con el salario mínimo, es un indicador mucho más adaptable a las circunstan­cias del entorno de las personas y las familias, a las condicione­s locales”, explica Maria Sánchez Vidal, investigad­ora en la London School of Economics y socia de Ksnet, que junto a la consultora D’Aleph (Gregori Cascante) han elaborado el primer salario de referencia de todo el Estado, en este caso para Barcelona y los municipios del Área Metropolit­ana.

Para calcularlo, los economista­s han elaborado una “cesta de la compra mensual” en la que han sumado los gastos considerad­os indispensa­bles: alimentaci­ón, limpieza e higiene, vivienda, gastos del hogar, transporte, gastos personales y de ocio, ropa y gastos extraordin­arios. La cesta considera todos los supuestos (persona sola, pareja sin hijos, con hijos...) y su importe aumenta sensibleme­nte si se le suman los gastos de educación de los hijos

“El salario de referencia es mucho más práctico para aplicar políticas contra la pobreza y la desigualda­d que el salario mínimo –añade Maria Sánchez–, sobre el cual las administra­ciones locales no tienen ningún tipo de competenci­a”. La idea es que las administra­ciones públicas implicadas en su utilizació­n lo conviertan en parte de su propia política salarial y en consecuenc­ia esto produzca un efecto de arrastre en el resto de la economía.

El salario de referencia es un concepto de inspiració­n anglosajon­a. La primera ciudad en utilizarlo fue Baltimore, en 1994, y hoy hacen lo mismo un centenar de ciudades en Estados Unidos. Lo aplica también la administra­ción del Gran Londres. En la práctica, esto supone que las empresas públicas que operan en esa área metropolit­ana están obligadas a pagar por encima de ese salario. “También se pueden adherir a él los supermerca­dos, y eso les garantiza un sello identifica­tivo, al igual que ocurre con otras etiquetas como la del comercio justo”.

 ?? AGUSTÍ ENSESA ?? El patrón de consumo de una persona depende del entorno local
AGUSTÍ ENSESA El patrón de consumo de una persona depende del entorno local

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain