Música estival en Sitges
Fangoria, Ara Malikian o Poveda, al Jardins de Terramar
El nuevo festival de verano Jardins de Terramar ha programado cinco grandes producciones, entre ellas una proyección de la película La La Land con la música interpretada en directo por una orquesta sinfónica de 50 músicos.
Sitges estrena este verano un nuevo festival musical. Se trata del Festival Jardins de Terramar, que desde el 28 de julio hasta el 5 de agosto ofrecerá cinco grandes producciones. Una proyección de la película
La La Land, con la música interpretada en directo por una orquesta sinfónica de 50 músicos, será la encargada de abrirlo. También actuarán Fangoria, Ara Malikian, Mayumana y Miguel Poveda, en una edición cero que se quiere convertir en “un proyecto de futuro”, según el director artístico, Carles Gilibets.
Estos espectáculos se complementarán con actuaciones de grupos y artistas locales. La cantante y flautista noruega establecida en Sitges Llørenz, Obi Funk Kenobi, Sour Mash, Gigi McFarlane & Juanlu Leprevost y Antonio Ramírez y Los Flamencorros son algunos de los grupos que actuarán en el escenario Village antes de los conciertos principales, en una programación consensuada con la asociación cultural local La Palmera Torta. Los grandes conciertos se podrán seguir desde una gradería con 1.500 asientos. El festival también programa música con discjockeys y habrá gastronomía mediterránea y étnica en furgotecas.
El presupuesto del festival, que organiza Jet Entertainment, asciende a 600.000 euros. Tiene el apoyo del Ayuntamiento sitgetano, y cuenta con La Vanguardia como medio oficial. Sus organizadores definen el festival como una propuesta “fresca, sugestiva y enriquecedora”. Apuestan por “atraer a un público variado sin sobrepasar las 2.000 personas diarias”, según su promotor, Joan Ramon Rodríguez.
El lugar donde se celebrará es un espacio emblemático de Sitges, los Jardins Noucentistes de Terramar, que el año que viene celebrarán su centenario tras haber recuperado y naturalizado sus balsas, donde se ha liberado fauna autóctona como centenares de renacuajos de sapo corredor y decenas de insectos recuperados de balsas temporales del parque del Garraf para regular el equilibrio del ecosistema acuático.
La organización dice que los Jardins de Terramar “escenifican los valores de civismo, cultura, paisaje, mediterraneidad y visión de país que encarnó el noucentisme”. También se añade que “la simbiosis entre cultura y festivales es uno de los ejes del Sitges actual”, y que “la dilatada condición de polo de atracción de artistas i creadores, la privilegiada ubicación geográfica, la disponibilidad de unas infraestructuras y espacios públicos y privados adaptados para acontecimientos de varios formatos y la voluntad de ejercer un papel relevante en el mapa cultural del país –y con plena vocación internacional– hacen de Sitges una población idónea para acoger festivales y acontecimientos culturales con proyección”.
La creación de un festival de esta envergadura ya se dibujó en el Plan de Mandato municipal del gobierno sitgetano. La concejal de Cultura, Rosa Tubau, recuerda que “Sitges es un pueblo muy rico en patrimonio cultural, aspecto que nos diferencia de otros lugares”. La voluntad municipal es conservar este patrimonio, así como “hacerlo accesible, incrementarlo y rentabilizarlo socialmente, teniendo en cuenta que constituye también un polo de desarrollo económico”. La concejal espera que el festival contribuya a la proyección de Sitges”.