El juez envía a prisión a Villar y su hijo
El magistrado aprecia riesgos para la instrucción
El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz acordó ayer prisión incondicional para el presidente de la FEF, Ángel María Villar, su hijo Gorka y el vicepresidente Juan Padrón. Los tres están acusados de falsedad, apropiación indebida, administración desleal, estafa y corrupción entre particulares.
La Guardia Civil no dio palos de ciego cuando inició la operación Soule, sobre presunta corrupción en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Había materia. Lo confirmó ayer plenamente el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, al acordar prisión incondicional para el presidente de la Federación, Ángel María Villar, y para su hijo Gorka, ambos acusados de falsedad documental, apropiación indebida, administración desleal y/o estafa y corrupción entre particulares. También ordenó el ingreso en la cárcel del vicepresidente económico de la entidad, Juan Padrón, acusado de haber participado en los mismos delitos.
Claramente, esta decisión judicial marcadefinitivamenteelfindelaera Villar. La orden de prisión sin fianza constituye una medida rigurosa y grave, que ningún juez suele adoptar sin un cúmulo de indicios sólidos, en un contexto en el que pueda apreciar riesgo de fuga, de destrucción de pruebas o de reiteración delictiva. Y el hecho es que el juez Pedraz recoge todas estas circunstancias en los autos que dictó ayer. Es decir, considera que hay datos relevantes sobre prácticas de corrupción en la Federación de Fútbol y, además, consideraqueexisteelpeligrodequeVillary su hijo intenten fugarse.
El magistrado estima asimismo que en el caso de que el presidente de la RFEF y su hijo Gorka quedaran en libertad, también podrían intentar dañar la progresión de la investigaciónpuestaenmarcha.Enestesentido, Pedraz subraya que las indagaciones están ahora en fase de confirmación de los indicios obtenidos, mediante el análisis de toda la documentación intervenida en los registros practicados el pasado martes. Parecidos argumentos sirven para el caso de Juan Padrón. En el auto aparece una conversación en la que el exseleccionador Javier Clemente le comenta: “Son votos, son votos comprados, ¡joder Juan! Apoyos comprados, decir amén por llevarse unos dineros”. Es decir Clemente advertía de sobornos en la RFEF.
La prisión provisional de todos ellos había sido solicitada por las dos fiscales encargadas del caso, Inmacula Violán y Esther González, que también pidieron la de Padrón. Se basaron en la gravedad de los delitos de los que se les acusa. Y pidieron prisión eludible con fianza para el secretario de la Federación Tinerfeña de Fútbol, Ramón Hernández Baussou, que actúa en la Federación territorial de Tenerife a las órdenes de Padrón, su presidente. El juez Pedraz también ha seguido los criterios de la Fiscalía sobre el cuarto de los detenidos, y ayer acordó para Hernández prisión eludible mediante el pago de una fianza de 100.000 euros.
A lo largo de 44 folios, el juez Pedraz expone los hechos que imputa a los directivos detenidos, para concluir de todo ello que actuaron “con la voluntad de enriquecerse y/o favo- recer el enriquecimiento de terceros”. Sostiene Pedraz que al menos desde el 2009 Villar creó un entramado que ha permitido la desviación de fondos tanto públicos como privados de la RFEF y de otros organismos vinculados a ella. Y añade que favoreció de forma ilícita a su hijo Gorka a través de la sociedad que administraba, Sport Advisers SL, todo ello en relación con la organización de partidos de la selección, por ejemplo con Corea del Sur, Chile y Venezuela. El juez sospecha que Gorka se lucró con 10 amistosos de la selección.
La resolución del juez pone de manifiesto algunas de las consecuencias derivadas del largo mandato de Villar, al frente de la RFEF desde hace 29 años. En este sentido, Pedraz afirma que el presidente de la Federación estableció sistemas organizativos y prácticas de “clientelismo”
JOSÉ MARÍA BRUNET LA REVELACIÓN En el auto hay una conversación en la que Clemente le dice a Padrón: “Son votos comprados” LOS OTROS DETENIDOS También hay cárcel para el vicepresidente económico de la RFEF, y fianza para el presidente tinerfeño LAS IRREGULARIDADES El magistrado sospecha que el hijo de Villar se lucró con diez amistosos de la selección española
tanto en la contratación del personal del organismo –una elección que suele recaer en familiares–, como en la presunta adjudicación arbitraria de contratos de suministro y prestación de servicios. Estos contratos benefician regularmente a empresas vinculadas directamente al propio Villar o a familiares. Las adjudicaciones acordadas se condicionan a “determinadas contraprestaciones”. Todo ello supuso que los imputados actuaron –sostiene el magistrado– “con incumplimiento de sus obligaciones como responsables de los fondos federativos y aprovechándose de los puestos que ostentan”.
El magistrado estima que el enriquecimiento logrado por los detenidos podría facilitarles ahora la huida. En este sentido, subraya que si les envía a prisión es en parte porque cree que podrían tratar de desaparecer, “máxime ante la gran capacidad económica de la que disponen”. Y añade que esos recursos se habrían obtenido gracias a sus “excesos en las facultades de administración”. Pedraz concluye que Villar, en concreto, actuó “aprovechando su posición de dominio y poder de disposición en la RFEF” en los más diversos planos de su gestión, por ejemplo con los nombramientos en la junta directiva.