Marta Voltas
ASOCIACIÓN CONTRA LA ANOREXIA
La asociación ACAB y la mesa para la prevención de los trastornos alimentarios han logrado un compromiso de Salut y Consum para reformar sus leyes, de manera que puedan perseguir la apología de la anorexia en internet.
Los responsables de Consum y de Salut en la Generalitat se han comprometido a modificar dos leyes para poder sancionar de forma efectiva aquellos contenidos en internet que hagan apología de la anorexia. El reto parece enorme, pero tanto los responsables políticos como la Associació contra l’Anorèxia i la Bulímia (ACAB) creen que hay que intentarlo. Aunque sea muy difícil de aplicar desde Catalunya contra la nebulosa internet que tiene por territorio el mundo.
La necesidad de ese cambio normativo se basa en que el 97% de las denuncias contra páginas en internet que inducen a iniciarse o perseverar en la enfermedad se topan con falta de derecho que les ampare. Así que “intentaremos llevar a cabo estas reformas en los próximos seis meses”, anunció la directora de la Agència Catalana del Consum, Montserrat Ribera.
“Visitar páginas que hacen apología de la anorexia no es inocuo y en absoluto disuasorio, como podrían pensar los adultos. Es todo lo contrario. El 60% de las pacientes reconoce que buscan contenidos no saludables en internet y el 70% admitía que les había hecho daño. A la vez, el 87% de las familias no sabían nada de esta navegación de sus hijas quinceañeras”, explica Marta Voltas, gerente de ACAB.
La situación es tan perversa que pacientes que estaban por la mañana en el hospital de día tratando con éxito su anorexia, por la tarde se conectaban a internet y “todo lo logrado quedaba deshecho”.
“Hemos demostrado con los equipos clínicos especializados que hay una clara correlación entre esa incitación no saludable y la iniciación, desarrollo y agravamiento de la enfermedad. También en las recaídas”, explica Voltas. “Pero cada intento de sacar de internet esos contenidos se ha topado una y otra vez con el derecho a la libertad de expresión. Por eso la Taula per a la Prevenció dels Trastorns de la Conducta Alimen-
tària pidió ayuda al Col·legi de Advocats de Barcelona, que encontró esta vía administrativa”, explica Voltas.
Según explicó Montserrat Ribera, la ley catalana de Salud Pública ya tiene un artículo que le capacita para vigilar y sancionar a los autores de contenidos de internet que repercutan negativamente en la salud, pero se reformará para especificar la apología de la anorexia. Y también se modificará el Codi de Consum de Catalunya para sancionar a los proveedores y alojadores de esos contenidos. “Aunque avanzan más rápido que nosotros. Ahora se extiende esta comunicación en grupos de WhatsApp”, advierte Voltas.