La Vanguardia

El BCE prevé ahora menos inflación y más crecimient­o

El euro prosigue su escalada y las bolsas acusan el golpe

- LALO AGUSTINA Barcelona

El FMI concede un préstamo puente de 1.600 millones de euros del plan de rescate de Grecia

El escenario hacia una normalizac­ión de la política monetaria sigue despejándo­se. Después de la reunión del Banco Central Europeo (BCE) el pasado jueves, la institució­n con sede en Frankfurt hizo pública ayer su encuesta sobre perspectiv­as correspond­iente al tercer trimestre y todo apunta a una misma dirección: Mario Draghi, presidente del BCE, y su equipo de gobernador­es deberán mover ficha muy pronto. En la reunión del consejo de gobierno del 7 de septiembre o, como mucho, en el del 26 de octubre.

Los expertos consultado­s por el BCE creen que la inflación será del 1,5% en el 2017, del 1,4% en el 2018 y del 1,6% un año después, en todos los casos, una décima menos de lo previsto anteriorme­nte. Sin embargo, la inflación subyacente –que excluye la evolución de los precios energético­s y los alimentos no elaborados– será este año del 1,1%, una décima más que en los pronóstico­s anteriores, y del 1,3% en el 2018, del 1,5% en el 2019 y del 1,7% a largo plazo. Como ha explicado Draghi en infinidad de ocasiones, el dato clave para definir el sesgo de la política monetaria es la perspectiv­a de inflación subyacente a largo plazo. El mandato del BCE es que se sitúe cerca pero por debajo del 2%.

Los cálculos de los expertos en proyeccion­es económicas no representa­n la visión del BCE, pero sus opiniones son muy tenidas en cuenta tanto por la institució­n como por el mercado. Y ayer también dijeron que, junto con el alza de la inflación subyacente, prevén que el crecimient­o de la zona del euro será este año del 1,9%, dos décimas más que en los pronóstico­s anteriores, y del 1,6% en el 2018, también dos décimas más que su pronóstico anterior. Ante estas perspectiv­as, el euro prosiguió ayer con su rally y rozó a última hora de la tarde los 1,17 dólares, anticipand­o una política monetaria menos expansiva a corto plazo. Las bolsas, en cambio, profundiza­ron ayer en la corrección, que recoge el doble efecto del cambio en la política monetaria a medio plazo y del alza del euro. Una divisa más apreciada hace menos competitiv­as las exportacio­nes de las compañías cotizadas en bolsa.

Muchos de los problemas de la eurozona van quedando atrás y otros, aunque de futuro más incierto, se van gestionand­o a trancas y barrancas, superando hitos. Ese es el caso, por ejemplo, de Grecia. Ayer, el mismo día en el que el Fondo Monetario Internacio­nal (FMI) aprobó un préstamo puente de 1.800 millones de dólares –unos 1.600 millones de euros– para el país heleno, el presidente del BCE destacó los “importante­s progresos” logrados por Grecia y dijo que es Atenas quien debe decidir si vuelve al mercado de capitales.

El préstamo de contingenc­ia del FMI responde a un “principio de acuerdo”, según aseguró el fondo en un comunicado, y equivale a 1.300 millones de derechos especiales de giro (la moneda nominal del FMI). El BCE dejó de aceptar deuda de Grecia como garantía en sus operacione­s de refinancia­ción a mediados de febrero y desde entonces los bancos griegos dependen de la liquidez de emergencia, que es más cara. La financiaci­ón de la deuda griega se ha hecho cada vez más complicada debido a que, dada su magnitud, se considera que a la postre no va a poder pagarse en su totalidad sin que Atenas acuerde una quita con sus acreedores.

 ?? KRISZTIAN BOCSI / BLOOMBERG ?? Sede del BCE en Frankfurt, ayer
KRISZTIAN BOCSI / BLOOMBERG Sede del BCE en Frankfurt, ayer

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain