La crisis de los precios de la fruta de hueso saca los tractores a la carretera
Agricultores catalanes y aragoneses protagonizarán hoy una marcha lenta entre las localidades de Fraga y Lleida en dirección a Barcelona por la A-2 y la AP-2, en protesta por la grave crisis de precios que sufre el sector de la fruta dulce, en concreto las producciones de melocotón, nectarina y paraguayo, una situación que se ha intentado paliar con la retirada de fruta del mercado para elaborar zumos y que incluso está provocando que se arranquen árboles en algunas fincas y que cooperativas y almacenes se nieguen a aceptar más fruta ya que tienen las cámaras frigoríficas llenas y el mercado se ve incapaz de colocar tanta producción.
El sector aún no se ha recuperado del veto ruso a la producción agroalimentaria europea por la crisis de Ucrania decretado hace tres años y que este año se ha visto agravado por la nueva barrera comercial de la Unión Aduanera Euroasiática (Bielorrusia, Kazajastán y Kirguistán, Rusia y Armenia) con nuevas normativas fitosanitarias más difíciles de cumplir –se exige a los países exportadores que estén libres de la enfermedad del frutal Monilia– para enviar fruta. El director general de Afruicat, Manuel Simón entiende que esta medida pretende beneficiar sobre todo a la fruta de Turquía. El cierre de estos mercados se agrava con la postura de las grandes distribuidoras y cadenas comerciales de España que han negociado precios ruinosos con los agricultores.
El diferencial de precio entre el árbol y el supermercado se ha multiplicado por diez según los datos recogidos por JARC-COAG. En el caso del melocotón, el sindicato asegura que en julio del 2010, antes del veto ruso, el fruticultor recibía de media 0,45 euros/kilo, mientras que el consumidor pagaba unos 2,28 euros/kilo, con un diferencial del 407%. En el 2014, con el veto ruso en todo su vigor, el diferencial se situó en el 910% (0,43 euros/kilo recibía el productor y 2,01 euros/kilo pagaba el comprador). Este año, el agricultor está recibiendo de media 0,27 euros/kilo y el consumidor paga 1,98 euros/kilo, con un diferencial del 633%.
Manel Simon, director general de Afrucat, explica que “en estos momentos nuestra petición entiende como prioritario incrementar la cuota de retirada del reglamento de medidas extraordinarias de entre 30 y 40 millones de kilos de fruta de hueso y que la CE permita que los melocotones y nectarinas, de manera excepcional, queden fuera de las normas de la competencia.