Irán amplía su programa de misiles en respuesta a las sanciones de EE.UU.
El Parlamento iraní aprobó ayer por una abrumadora mayoría ampliar el presupuesto destinado al programa de misiles balísticos, así como dedicar una importante cantidad extra a las operaciones de la Guardia Revolucionaria en el extranjero. Desde los escaños de los diputados se oyeron gritos de “muerte a Estados Unidos”, dejando a las claras que la partida aprobada era una respuesta retadora a las nuevas sanciones que les había impuesto la Administración Trump a principios de mes.
El proceso legislativo no se ha acabado, pero se da por hecho que pasará todos los trámites pendientes. El presidente iraní, el moderado Hasan Rohani, también lo apoya. Así lo aseguró ante los parlamentarios uno de sus lugartenientes, el viceministro de Exteriores, Abas Araghchi, quien también formó parte del equipo que negoció el acuerdo nuclear con la comunidad internacional.
Según la agencias iraníes, el presupuesto, que ronda los 677 millones de euros, se ha elaborado cuidadosamente para que no se pueda decir que viola los pactos de aquel acuerdo. La principal partida se destina efectivamente a misiles de largo alcance, pero en ningún caso presupone que se trata de un intento de retomar el programa nuclear. Los proyectiles irían destinados a llevar carga balística convencional y estarían dentro del apartado habitual de cualquier país que pretenda reforzar sus defensas.
Otras partidas del presupuesto estarán destinadas a diferentes programas del Ministerio de Defensa. Pero llama especialmente la atención la ampliación del presupuesto para los grupos expedicionarios de los Guardianes de la Revolución, una fuerza separada del ejército convencional y que depende directamente del líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei. Esta fuerza expedicionaria es la que ha estado actuando tanto en Siria como en Irak.
La nueva normativa también incluye mayores controles a la entrada de americanos y la prohibición expresa de viajar al país a mandos del ejército estadounidense, por apoyar a grupos terroristas. Teherán ha acusado en diversas ocasiones a Estados Unidos de apoyar al Estado Islámico y Al Qaeda en el conflicto de Oriente Medio. De los 247 diputados iraníes, sólo seis votaron en contra y uno se abstuvo.
La decisión del Parlamento llega apenas unos días después de que el presidente Trump firmara nuevas sanciones contra Irán. El Gobierno iraní le acusó de “querer romper” el acuerdo nuclear firmado bajo el mandato de Obama.