Podemos en versión ‘brasileira’
El veterano senador Días y el exfutbolista Romário fundan un nuevo partido homónimo del español, pero de centro
Si existieran derechos de propiedad intelectual en al nomenclatura de los partidos políticos, Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero e Íñigo Errejón seguramente estarían hablando con sus abogados. El recién creado partido Podemos en Brasil está a punto de presentar un candidato a las elecciones presidenciales del 2018 que no tiene nada que ver con la izquierda brasileña y que es uno de los senadores más viejos de Brasilia .
Álvaro Días, de 72 años, es de la antigua guardia de senadores políticos brasileños, versada en el arte de la supervivencia. Ha representado a nada menos que nueve partidos desde que inició su carrera política como diputado regional en 1972. Acaba de fundar Podemos, junto con el ex futbolista del Barça Romário. Pero la única similitud con Podemos en España es el nombre. Días apoyó la destitución de la presidenta de izquierdas Dilma Rousseff. Defiende el encarcelamiento de Luiz Inácio Lula da Silva por presuntos delitos de corrupción, pero no apoya a quienes pidieron la salida de Michel Temer pese a los indicios de corrupción del actual presidente. Días retrató el nuevo partido durante una entrevista a La Vanguardia mantenida en su despacho de la moderna sede del Congreso en Brasilia. “No tenemos un vínculo ideológico de derecha o izquierda. Somos de inspiración europea”, dijo. “El movimiento Cinco Estrellas italiano; Macron también; con un poco del Podemos español, pero somos diferentes porque no tenemos perfil ideológico, aunque sí compartimos el combate contra la corrupción, defendemos la democracia directa y hacemos énfasis en las redes sociales”, añadió. Hace falta algo nuevo, insistió el veterano senador, porque “estamos en un momento en Brasil en el que los partidos existentes están tremendamente desacreditados y desmoralizados”.
La clase política en Brasil, desde luego, atraviesa una enorme crisis de imagen. Gran parte de los representantes en el Congreso están bajo investigación por corrupción en el caso Lava jato (lava coches). La mayoría de los brasileños pedían elecciones tras la destitución de Rousseff, que algunos como un golpe de Estado parlamentario. Hace falta una profunda reforma política. Pero la propuesta que emerge en estos momentos es de dar un mayor poder al Congreso, con sus decenas de partidos, la mayoría sin ideología definida, que compiten por el dinero de los lobistas.
Los políticos que están aprovechando la crisis de legitimidad del sistema son ultraconservadores como Jair Bolsonaro, que defendió un golpe militar contra Rousseff y llegó a decirle a una congresista que “debería ser violada”, o populistas de la derecha cristiana. Como João Doria, que recién elegido alcalde de São Paulo, dio luz verde a la demolición de un edifico donde vivían adictas al crack sin desalojarlo primero. Bolsonaro y Doria son los candidatos de la derecha que más éxito tienen en los sondeos aunque Lula –ahora con un discurso mas radical de izquierdas– sigue siendo el mejor valorado de todos. De ahí, la idea de Días y Romário de crear el Podemos versión brasileña: “Si no se presenta una alternativa con credibilidad en el centro que pueda galvanizar las fuerzas lúcidas del país, los movimiento sociales, empresariales y de trabajadores, corremos el riesgo de tener candidatos de la extrema derecha o de la extrema izquierda”, dijo.
Días tiene un historial relativamente limpio en el contexto brasileño. Salvo alguna denuncia menor, no se ha visto involucrado en la investigación implacable contra la corrupción de los fiscales brasileños del caso Lava jato. No ha salido en la larga lista de sobornables de la mega constructora Odebrecht (ocho ministros de Temer sí salieron, así como más de 100 miembros del Congreso de 20 partidos distintos, así como el líder de la oposición y el alcalde y el gobernador de Río de Janeiro). “Estamos viviendo una investigación profundísima pero muchos continúan ilesos y yo me situó entre ellos”, dijo.
Días, además, encabezó una investigación parlamentaria contra la corrupción en el fútbol tras el Mundial de 1998 que Andrew Jennings, el periodista británico que destapó el escándalo de la FIFA, ha elogiado. Intentó encabezar otra investigación el año pasado, en colaboración con Romário, tras la investigación del FBI a la FIFA, pero reconoció en la entrevista que no dio resultados. Pese a ello, es difícil imaginar cómo un senador septuagenario de pelo teñido y tan estrechamente identificado con la vieja cultura política puede reciclarse de forma tan radical como para encabezar el supuesto partido del cambio.
En algún momento, Romário, que tantea presentarse a la elección a gobernador de Río de Janeiro, tal vez podía haberlo hecho. Tras el nacimiento de su hija con síndrome Down, dejó su jubilación ociosa dedicada a jugar futvoley en la playa de Barra de Tijuca y se metió en la política y cayó bien... Su oposición contra el Mundial y la FIFA le ganó muchos adeptos tras las protestas del 2013. Pero luego él mismo fue investigado por tener cuentas bancarias en Suiza.
“Nada tiene que ver este Podemos con el español”, dijo Juca Kfouri el periodista deportivo en una conversación telefónica mantenida el lunes. “Días esta tan contaminado por la vieja política como cualquiera; Romário es tan oportunista en la política como en el área de penalti”.
Por eso, tal vez, Podemos Brasil está intentando fichar a miembros del único poder del Estado de Derecho brasileño que cuenta con algo de apoyo popular en estos momentos: los jueces de Lava jato que desde su cuartel general en Curitiba , en el estado de Paraná, han estremecido al mundo político y empresarial. Según Folha de São Paulo, “el sueño del partido es afiliar a los fiscales paranaenses de Lava jato”. Días tiene una ventaja, quizás, ya que es senador por el mismo estado... Según el influyente columnista de este mismo diario Reinaldo Azevedo, Días ha hablado con uno de los jóvenes fiscales del estado más queridos por los medios, Deltan Dallagnol, sobre presentar una candidatura al Senado por Podemos. Dallagnol encabezó la investigación sobre Lula en el escándalo de sobornos y llegó a declarar, sin dar pruebas, que el expresidente “es el máximo comandante del esquema de corrupción”. Días no confirmó que Dallagnol será candidato de Podemos. El otro juez más destacado de la investigación Lava jato en Curitiba, Sergio Moro, se considera más próximo al PSDB.
Gente en el entorno del Partido de los Trabajadores dudan de que Podemos logre atraer a los fiscales. “¿Para qué van a meterse los jueces en la política si ya están?”, ironizó un alto cargo del banco público BNDS en Río en referencia a las acusaciones de politización en la investigación judicial.
Los políticos que están aprovechando la crisis de legitimidad del sistema en Brasil son de signo ultraconservador El nuevo partido centrista intenta fichar a algunos de los jueces y fiscales anticorrupción