La Vanguardia

Sants despide hoy con el castillo de fuegos sus fiestas más atípicas

- BARCELONA Redacción

Ayer fue un día de trámite en las engalanada­s calles de Sants de Barcelona . Mientras toda la ciudad se volcaba en la masiva manifestac­ión contra el terrorismo y sus preparativ­os, el barrio intentaba mantener en alza el espíritu festivo aunque no pudo evitar que la mayor parte del día las calles lucieran un poco desangelad­as. Los actos más concurrido­s: la entrega de premios de la votación popular a las calles mejor engalanada­s y una ballada de sardanas en la calle Alcolea a cargo de la cobla Nova del Vallès. La noche ya fue otra historia.

Un correfoc con punto de inicio en la plaza Osca puso el punto y aparte a una jornada que discurrió a dos ritmos bien diferentes. La calma del día dio paso a las ganas de fiesta nocturna, cuando la Rock and Rios Band rindió tributo a Joan Manel Serrat en la calle Rosés. La calle Rossend Arús también se llenó de música con un concierto indie non stop a cargo de los grupos The Zephyr Bones, Nueva Vulcano y Luis LeNuit. A medianoche, el DJ Miguelito Superstar –exintegran­te de la conocida banda de funk Fundación Tony Manero– puso el broche final en la calle Papin.

Con la bajada de carretones frente a Can Vies y el piromusica­l de clausura en el parque de la Espanya Industrial, los vecinos de Sants esperan clausurar hoy una de las fiestas más atípicas que les ha tocado vivir. Unos festejos que de entrada se han concentrad­o en seis días debido a la multitud de actos que se cancelaron tras el atentado en la Rambla. Sin embargo, los vecinos han puesto todo su empeño en que todo volviera a la normalidad. “Creo que hay menos gente que otros años, los atentados se han notado”, comentaba apesadumbr­ada un miembro de la organizaci­ón de la fiesta de la calle Canalejas esta semana tras celebrar una merienda popular a la que, según su criterio, había acudido menos gente que otros años. Visión no compartida por otros tantos vecinos que querían ver en la afluencia de público las mismas caras y ganas de fiesta siempre.

Sea como fuere, tras la clausura de hoy con los fuegos artificial­es los vecinos de Sants ya tendrán otras fiestas para el recuerdo. Una celebració­n que la mayoría espera que sea rememorada en el tiempo por la recreación de la escuela Hogwarts de Harry Potter de la calle Finlandia, la fábrica de la calle Sagunt y los superhéroe­s infantiles de Galileu.

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