Productores de manzana ecológica crean Biolord
La cooperativa Biolord apuesta por hacer viable el trabajo de la tierra en las zonas de montaña con el cultivo de manzana ecológica de alta calidad. El objetivo es cerrar todo el círculo: producir, comercializar y, si hace falta, manufacturar. Cuenta con 16 socios del Solsonès, el Pallars Sobirà, el Berguedà y la Cerdanya, que trabajan con variedades adaptadas al entorno para ofrecer un producto exclusivo y de máxima calidad. La calidad pasa por la producción ecológica, la proximidad como criterio para la comercialización y la altura del cultivo (una altura mínima de 700 metros). Todos ellos trabajan bajo las mismas directrices; plantan las mismas variedades, las cultivan de igual manera y tienen una única estructura comercial.La Associació Agraria Ecològica Poma de Montanya empezó su actividad en el 2012 con siete socios que agrupaban unas 2 hectáreas y una cosecha de una tonelada. Este 2017, los socios ya son 16, disponen de unas 16 hectáreas, y la cosecha se sitúa entre las 40 y las 50 toneladas (hasta el cuarto año de plantación un manzano no empieza a tener un rendimiento normal). En el Pallars Sobirà hay dos socios; uno en Escòs (Soriguera) y el otro en Escalarre (La Guingueta d’Àneu). Dolors Rosés gestiona con su familia 1,5 hectáreas de manzana de alta montaña. Llevan 3 años con la plantación y esperan llegar a producir unos 60.000 kilos de manzana cuando estén a pleno rendimiento. Biolord cuenta con cuatro variedades de manzana; Renoir, que llaman Bruna de montaña; la Crimson Crisp, que para ellos es la Roja de montaña; la Story Inoret, que lleva por nombre Negreta de Muntanya, y la Opal o amarilla de montaña. Rosés explica que la Bruna es probablemente la manzana estrella. / ACN