Cellnex compra la holandesa Alticom por 133 millones
Cellnex Telecom ha cerrado la adquisición a Infracapital del operador holandés de infraestructuras de telecomunicaciones Alticom en una operación que alcanza los 133 millones de euros de inversión y que aportará a la compañía con sede en Barcelona 11,5 millones de ebitda en el 2018. Cellnex ha financiado la operación con capital propio y crédito bancario.
Con esta adquisición se integran 30 torres y emplazamientos de largo alcance en toda Holanda: las 30 torres prestan servicios de ubicación para equipos de transmisión de telecomunicaciones inalámbricas, localización de servidores y acceso a la red troncal de fibra óptica. Alticom tiene entre sus clientes a todos los operadores de telecomunicaciones y radiodifusión en Holanda, con los que tiene contratos de 5 a 10 años.
El consejero delegado de Cellnex, Tobias Martínez, afirmó que Alticom aporta solidez a Cellnex en los Países Bajos al incorporar un negocio recurrente, “con flujos previsibles a medio y largo plazo”, y además implica una nueva apuesta por el 5G. Los emplazamientos de Alticom serán importantes en el despliegue del 5G porque cuentan con capacidad –y conectividad a la red troncal de fibra óptica– para albergar servidores remotos o caché (caching servers) que acerquen la capacidad de proceso de datos y almacenamiento a los usuarios finales de las aplicaciones basadas en el 5G, que van a multiplicar la demanda de tráfico y requerimientos de cada vez más personas y objetos conectados.
Como pasó con la adquisición de CommsCon en Italia en junio del 2016, Alticom suma capacidades al ecosistema 5G de Cellnex, empresa que preside Francisco Reynés y hoy el principal operador independiente de infraestructuras de telecomunicaciones inalámbricas, con una cartera total de más de 21.000 emplazamientos.
Tobías Martínez añadió que la clave en el despliegue del 5G será “responder al reto tecnológico de la latencia” (velocidad de respuesta). El 5G supondrá crecimientos del tráfico de datos en movilidad del 600% en los próximos cinco años (muy basado en la descarga de contenidos audiovisuales); una rapidez hasta 1.000 veces superior a la del 3G, y una latencia de hasta 1 milisegundo (100 veces inferior al 4G).