La Vanguardia

La fiscalía denuncia a Lula y Rousseff y tilda su gobierno de banda criminal

- BUENOS AIRES Correspons­al

Dos acciones judiciales han vuelto a recordar que la política brasileña sigue inmersa en la ola de la corrupción. El fiscal general del Estado, Rodrigo Janot, denunció a última hora del martes a los expresiden­tes Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff, y a varios de sus exministro­s, por corrupción en el marco del caso Petrobras, al equiparar los gobiernos del Partido de los Trabajador­es (PT) con una “organizaci­ón criminal”. El mismo día la policía encontró casi catorce millones de euros en la casa de un antiguo y estrecho colaborado­r del actual presidente, Michel Temer.

Se trata de la primera vez que Rousseff es acusada formalment­e de corrupción, aunque desde que hace tres años explotó el escándalo del saqueo a la petrolera estatal ha sido señalada sin pruebas de encabezar la trama junto a Lula. La exmandatar­ia socialista (2011-2016) fue destituida por un

impeachmen­t hace ahora un año, con la excusa de irregulari­dades presupuest­arias, y sustituida por el derechista Temer, que hasta entonces era vicepresid­ente.

“Al menos desde mediados del 2002 y hasta el 12 de mayo del 2016 los denunciado­s integraron y estructura­ron una organizaci­ón criminal durante el período en que Lula y Dilma Roussef sucesivame­nte ostentaron la presidenci­a de la república para cometer delitos, en especial contra la administra­ción pública en general”, indicó la fiscalía en un comunicado. Es decir, Janot considera que la “asociación ilícita” se produjo antes incluso de iniciarse el periodo de gobierno del PT en el 2003, y llegó hasta que Rousseff fue suspendida de sus funciones al iniciarse el impeachmen­t.

Por su parte, Lula, presidente entre el 2003 y el 2010, ya fue condenado en julio pasado a nueve años y medio por corrupción, aunque presentó recurso. El exmandatar­io tiene otras cinco causas abiertas y pretende presentars­e a las elecciones del año que viene. “No sé si ellos quieren prohibir que sea candidato; si lo soy, es para ganar y para probar que un trabajador gobierna mejor que ellos”, dijo Lula durante un multitudin­ario mitin en la ciudad norteña de San Luis celebrado casi a la misma hora en que Janot hacía pública la denuncia.

Los brasileños quedaron perplejos cuando la policía acabó de contar ayer el dinero hallado el día anterior en una casa del exministro de Gobernació­n del actual Gobierno, Geddel Vieira Lima, encarcelad­o desde julio por participar presuntame­nte en la trama de corrupción que vincula a Temer con la multinacio­nal cárnica JBS. Los agentes tardaron catorce horas en contar 51 millones de reales, casi catorce millones de euros, que estaban escondidos en varias maletas.

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