Sanciones a Corea del Norte
El Consejo de Seguridad de la ONU votó anoche una nueva resolución contra Corea del Norte tras sus últimos ensayos nucleares, aunque sustancialmente suavizada respecto a la intención inicial de EE.UU. Washington se ha visto obligado a ceder para tratar de lograr el apoyo de Rusia y China, aliados del régimen y con derecho a veto. El primer proyecto de resolución de EE.UU. en respuesta al sexto ensayo nuclear de Pyongyang, el 3 de septiembre, planteaba un embargo total e inmediato sobre petróleo y gas, la expulsión a Corea del Norte de sus expatriados (más de 50.000), la congelación de los activos de Kim Jong Un, la prohibición de importar textil norcoreano y la autorización del uso de fuerza para abordar navíos sospechosos de llevar cargamentos prohibidos por las resoluciones de la ONU. Tras cuatro días de arduas negociaciones con Pekín y Moscú, el embargo petrolero ha pasado a ser “progresivo” y se ha eliminado la congelación de activos del líder norcoreano, según el borrador de la resolución que circulaba ayer entre los medios. Se mantiene en cambio el embargo sobre el gas y el veto textil, mientras que las medidas sobre los expatriados y las inspecciones a cargueros se suavizan. La resolución contó con el apoyo unánime de los 15 miembros del Consejo. Corea del Norte había advertido que EE.UU. pagaría un “alto precio” si sus sanciones eran aprobadas.