El teatro barcelonés crece al 5%
El aumento de espectadores se acelera pero aún hay menos que antes de la crisis
El teatro catalán empieza a dejar atrás la crisis, pero aún no la ha superado del todo. La Associació d’Empreses de Teatre de Catalunya, Adetca, hizo públicos ayer los datos de la temporada pasada en Barcelona: el teatro de la ciudad crece a un ritmo del 5% y pasa de 2.410.671 a 2.537.836 espectadores, esto es, 127.000 más en un solo año. Y crece un 6,9% en ingresos, que han pasado de 59,1 millones de euros a 63,18, cuatro millones más. Aun así, en la temporada 2011-12 los datos eran mejores: el público se aproximaba a los tres millones –2.890.624– y la recaudación era de 68,1 millones de euros.
La crisis acabó laminando la buena marcha del teatro catalán y ahora por fin la situación parece cambiar de forma decidida: para la presidenta de Adetca, Bet Orfila, es la primera vez en los últimos años que cierran la temporada con un crecimiento verdaderamente notable, y eso, unido a la bajada del IVA –la celebró, pero lamentó que se haya bajado del 21 al 10 y no al 8% que había inicialmente– les hace afrontar con optimismo el nuevo curso teatral, que comenzó anoche en el Liceu con la tradicional gala Catalunya aixeca el teló.
Si en la gala presentaron las propuestas de las que viene cargada la nueva temporada, antes hicieron públicos los espectáculos triunfadores del año pasado. Como viene siendo habitual, tres musicales –o casi, porque Gente bien de La Cubana es un híbrido cubanero– fueron los que lograron la máxima audiencia. Gente bien fue el espectáculo más visto del año con 158.756 espectadores, lo que hizo además que el Coliseum fuera el tercer teatro de la ciudad con más espectadores de pago detrás del Tívoli y del Gran Teatre del Liceu. El segundo espectáculo más visto del año fue el musical de Dagoll Dagom Scaramouche, con 133. 618 espectadores en el teatro Victòria, y el tercero fue el musical Priscilla,
reina del desierto, en el Tívoli, con 95.594 espectadores. En el número cuatro del ranking se cuela una obra de teatro de texto: el Art de Yasmina Reza protagonizado por Pere Arquillué en el Goya y que ha logrado 81.725 espectadores y regresa esta temporada. Y el quinto espectáculo más visto del año es de nuevo un musical y que también vuelve, en este caso al Tívoli:
Dirty dancing, con 63.367 espectadores porque no cabían más: tuvieron que programar sesiones dobles tres días a la semana.
Para los amantes de la estadística, el 54% de los espectadores vieron obras en catalán, el 30% en castellano, el 1,8% obras bilingües, el 10% en otros idiomas y el 4% de obras fue sin texto. De hecho, el 60% de los autores de las 1.106 obras que se han visto este año en los teatros de Barcelona son catalanes, el 15% del resto del Estado y el 25% internacionales. Por géneros, el 47, 1% de los espectadores fueron para el tradicional teatro de texto, que ha caído cinco puntos y 66.130 espectadores, mientras que el musical ha vivido un boom: el 26,1% de los espectadores han ido a musicales, que han pasado de 350.206 a 662.797 en un solo año, un 89% más.