Oda al trabajo

Las matemáticas, como el algodón, no engañan. El Barça ha hecho los deberes en un inicio inmaculado de campeonato. El calendario, la coyuntura por los tropiezos del Madrid, los goles de Messi, la buena mano de Ernesto Valverde y una pizca necesaria de fortuna. Todos son factores que pueden explicar el liderato blaugrana y que se resumen en aquella frase que Alfredo di Stéfano empleaba dirigiéndose a los porteros: “No te pido que atajes las que vayan dentro pero por lo menos no te metas las que vayan fuera”. Traducido a nivel colectivo quiere decir que el Barcelona no ha fallado allá donde no tenía que hacerlo. En partidos donde el favoritismo era no claro, sino clarísimo. En encuentros de pelaje similar a los que en la temporada pasada se dejó buena parte de sus opciones al título liguero, como los de Riazor y La Rosaleda. En esos duelos donde puedes quedar retratado el Barcelona ha apostado por el trabajo para cincelar la victoria y en el desequilibrio para decidir.

No es un equipo todavía redondo, pero sí una máquina de hacer goles. No es aún la Filarmónica de Viena, pero sí un grupo que ha votado en su referéndum interno por el sacrificio tras un verano de zarandeo. Sólo desde la premisa de la voluntad se puede construir el futuro y en eso se están aplicando los hombres de Valverde, que va tocando piezas, que va introduciendo rotaciones (ayer otros seis cambios) y que continúa dando el mando en plaza sin descanso a Messi y a Iniesta, titular en tres partidos de Liga seguidos, una continuidad que no consiguió en toda la pasada campaña y que el primero que lo agradece es él mismo.

Si hay que correr se corre. Anoche el mandato del banquillo era claro: colocar balones en profundidad. Se desmarcó al espacio Suárez, pero él lo hace siempre, ayer con premio. Tiró metros hacia delante Messi, como contra el Eibar. Se internó Aleix Vidal. Y Alba. Y Paulinho, ese bisonte que irrumpe como un elefante en una cacharrería. Esa fe en el objetivo, ese deseo, es muy importante para que el proyecto vaya tomando cuerpo. Por algo se empieza.