Territorio Semedo
El lateral regresa a su país con la aspiración de ser titular por fin lejos del Camp Nou
Podía haber cogido la moto donde se crió, en la pedanía de Mira-Sintra, un núcleo de unos 6.000 habitantes, entre mar y montaña, a 20 kilómetros de Lisboa, pero prefirió usarla, metafóricamente, en los terrenos de juego. Ahora lo hace en el Camp Nou y hoy quiere estrenarse a domicilio como titular con el Barça. Nélson Semedo regresa a su tierra, muy cerquita de los lugares en los que pateaba el balón por las calles, ya que hasta los 15 años no consiguió que lo federaran. Aspira el lateral a vestir de barcelonista esta noche sobre el césped, pero bien podía haber ocurrido que jugara ataviado con la camiseta blanquiverde del Sporting de Portugal. ¿Cómo es eso si nunca ha militado en el club de los leones? Hizo las pruebas para incorporarse a su fútbol base y las pasó pero no hubo entente económica entre el equipo del Alvalade y el suyo, el Sintrense. “Así fue. Estuve muy cerca y hoy digo que fue una fortuna para mí porque así pudo aparecer en mi vida el Benfica unos meses después. Sin el Benfica no estaría en el mejor equipo del mundo”, proclama Semedo.
El fichaje frustrado no es la única curiosidad que ejerce de intersección entre el jugador y el Sporting. El defensa de raíces caboverdianas debutó con el primer equipo del Benfica el 9 de agosto de 2015, en la Supercopa, ante el gran rival lisboeta, en lo que curiosamente supuso el último título hasta la fecha del Sporting. Ha jugado tres veces contra los leones con un saldo equilibrado de una victoria, un empate (en el Alvalade) y la mencionada derrota.
Su debut fue un día especial para Semedo, como lo puede ser hoy. Pese a su discusión en la pretemporada con Neymar el portugués ha tenido un buen aterrizaje en el vestuario blaugrana, donde han empezado a llamarle motorista, según reveló André Gomes en A Bola por su capacidad para subir y bajar la banda. “Ya tenía una velocidad que parecía que ni pisaba el suelo, por eso le llamaban MotoGP”, recuerda su entrenador en el Sintrense, Luis Loureiro.
“Tengo una característica que es dar profundidad a los partidos, porque subo y bajo. Se debe a eso que me llamen así. Trabajamos siempre en el entrenamiento. Intento perfeccionar mi juego y espero seguir haciendo honor a ese apodo”, afirma el defensa, que cree que hay que darle mucho mérito a los sustitutos de Neymar. “Hay otros futbolistas que lo están supliendo con mucho valor y merecen que se apueste por ellos”.
Su puro vértigo ha sorprendido al gran público junto a sus buenas aptitudes técnicas. Frente al Juventus, en la puesta de largo de esta Champions, rayó a un nivel notable y, contra el Betis, el Espanyol y el Eibar, siempre en casa, tampoco desentonó. Le falta transmitir las mismas sensaciones a domicilio porque apenas ha sido alineado fuera, aunque cuando entró en el Santiago Bernabeu mejoró las prestaciones del equipo.
“Cada vez me siento mejor en el equipo, el vestuario del Barça es como una familia”, argumenta Semedo. “Nélson es un jugador que se ha ido acoplando poco a poco al equipo. No es fácil entrar en la dinámica del Barça pero ha ido mejorando mucho. Cada vez que juega nos ayuda en ataque y en defensa. Pensamos que nos va a ayudar mucho y que tiene recorrido en el equipo”, augura Ernesto Valverde.
A sus 23 años espera tener una larga trayectoria en el Barcelona, acorde al importante desembolso económico realizado por él (30,5 millones más unas suculentas variables). Nelsinho, como le conocen sus íntimos, es un buen amante del rap criollo, propio de la tierra de sus padres, pero no fue eso lo que le hicieron cantar a modo de novatada en la gira estadounidense del Barça, en Miami. Allá tuvo que subirse a una silla y entonar un fado. Se sobrepuso bien a la emboscada, como de momento se está sobreponiendo al reto de ocupar un carril muy exigente.
EL MENSAJE
“En el vestuario me llaman motorista porque subo y bajo, trabajo en los entrenamientos para hacer honor a este nombre”