Erwin Olaf, el controvertido fotógrafo de la casa real holandesa
Erwin Olaf es el autor de las nuevas imágenes oficiales de Máxima de Holanda
Que una casa real escoja para realizar las imágenes oficiales de algunos de sus miembros a un fotógrafo considerado controvertido, cuando no directamente provocador, que ha recurrido con frecuencia en sus creaciones a los desnudos frontales, con especial gusto por el homoerotismo, el sadomasoquismo y lo bizarro, debe pasar solo en Holanda.
En efecto, el autor de los comentados nuevos retratos oficiales de la reina Máxima y sus tres hijas, que han sorprendido por su aire moderno, que parecen más propios de portada de revista que de una casa real –se trata de unos primerísimos planos de sus rostros, con el cabello al viento y con maquillaje muy natural y sin apena retoques digitales– no es otro que Erwin Olaf, fotógrafo holandés que se ha ganado fama internacional con unas imágenes audaces y perturbadoras que se alejan de la realidad y en las que dominan lo extraño, el erotismo o la sátira. Sus principales referentes son tres célebres fotógrafos tampoco nada ajenos a la polémica: David Lachapelle y los fallecidos Helmut Newton y Robert Mapplethorpe, así como el genial pintor expresionista alemán Otto Dix.
Nacido en Hilversum en 1959, Erwin Olaf –cuyo nombre completo es Erwin Olaf Springveld– comenzó siendo fotoperiodista, pero pronto se dio cuenta de que lo que deseaba era recrear su propio “mundo de ensueño con historias que están por desvelar y cuyo final queda abierto, de manera que cada cual pueda inventar su propia historia”. Desde comienzos de los 80 vive y trabaja en Amsterdam. A mediados de aquella década empezó a hacerse célebre en la comunidad gay, con la que está comprometido, gracias a una imagen en la que un joven simula un masturbación sujetando por el cuello una botella de champán recién abierta que derrama su espumoso líquido por su cuerpo. Una temática esta, la del erotismo homosexual, mostrando sin pudor penes erectos de generosas dimensiones, que fue habitual en los inicios de su obra pero que ha ido soslayando posteriormente.
Ha trabajado y trabaja en la fotografía publicitaria y especialmente en la de moda, con creacio-
nes para grandes marcas como Diesel, Levi’s, Heineken, Microsoft, BMW, Lavazza o Nintendo, pero cada vez más intenta dedicarse en exclusiva a la fotografía artística.
En ese terreno su despegue internacional se inició en 1988 a raíz de su serie de fotos denominada
Chessmen, por la que fue galardonado con el primer premio en el concurso para jóvenes talentos Young European Photographer Competition. Se trata de unas imágenes surrealistas y bizarras en blanco y negro pobladas por orondas féminas, enanos, caballos y personajes con máscaras, cuernos, corazas o cascos estilo romano. Tras este premio se le dedicó ya una gran exposición en el museo Ludwig de Colonia, en Alemania.
Su serie quizá más famosa y con más repercusión internacional ha sido Fashion Victims, haciendo referencia al término inventado por el conocido diseñador Oscar de la Renta para referirse a las personas atrapadas en el dictado absoluto de la moda. Son retratos de hombres y mujeres desnudos con las cabezas cubiertas con bolsas de grandes marcas como Armani, Yves Saint Laurent, Vuitton... Entre los temas recurrentes en la obra de Erwin Olaf destaca precisamente el consumismo excesivo.
En 1999 las fotografías de Erwin Olaf para una campaña mundial de vaqueros de Diesel, ganó el codiciado León de Plata en el reconocido Festival de Publicidad de Cannes. Dos años después fue galardonado con el mismo premio gracias a una imágenes producidas para Heineken. Entre muchos otros galardones, en el 2006 le fue concedido el premio de Fotógrafo del Año en The International Color Awards, y en 2007 la revista
Kunstbeeld le declaró mejor artista holandés. Recientemente recibió también el premio Lucie por el conjunto de su obra.
En su trayectoria artística ha explorado también en los campos del cine y el vídeo. Su ópera prima como director, junto al pintor F. Franciscus, fue la película Tadzio en 1991. En el 2003 creó la elogiada pieza de videoarte Separación,
lluvia y duelo. También ha participado en la creación de cómics y programas televisivos. En los últimos tiempos ha experimentado también con la creación en 3D. “Cada día me intereso más por crear una obra de arte integral , en la que el espectador participe con varios sentidos, no solo con la vista sino que también pueda pasar por ella, oírla o tocarla. Creo que esto enriquece a mi obra, me ofrece más herramientas para involucrar al espectador”, ha señalado el artista.
El artista ha recurrido con frecuencia al homoerotismo, el sadomasoquismo y lo bizarro