La Vanguardia

“Voladd es la primera impresora 3D con sentido en la vida cotidiana de las personas”

Con sólo tres años, Tumaker es uno de los principale­s fabricante­s españoles de impresoras 3D. Desde San Sebastián, suministra equipos profesiona­les y servicios, a pymes y grandes empresas del sector industrial, y ahora ha sorprendid­o a todo el mundo con u

- JON BENGOETXEA CEO DE TUMAKER

¿Qué tipo de impresoras van a mostrar esta semana en In(3D)ustry?

Tenemos fundamenta­lmente una sección industrial y la que acabamos de lanzar para el mercado doméstico. Desde 2012 empezamos a trabajar en el proyecto y ya somos una empresa consolidad­a y líder en España en impresoras 3D de gran formato, conectadas con nuestro producto BigFoot, especialme­nte desarrolla­das para la mejora de procesos y alta productivi­dad para el mercado industrial. Esta tecnología de Tumaker está ayudando a mejorar procesos de forma productiva a clientes como Bosch, Mercedes, ABB, Grupo Gureak o Corporació­n Mondragon. Y ahora queremos dar el salto al mercado de consumo con Voladd, la primera impresora 3D, que da el poder a las personas, para crear lo que necesitan, cuando quieran y donde quieran. Y lo veréis en nuestro stand.

¿Qué la hace diferente de otras impresoras 3D?

Es disruptivo, algo totalmente nuevo. Existen impresoras 3D para el usuario doméstico pero solo en el precio. No son usables para el gran público. Tienes que aprender más de lo necesario para disfrutar de ellas. Es como si tuvieras que saber un poco de solfeo para escuchar música. Es absurdo. Hemos puesto en cuestión el status quo que rodea a la impresión 3D. Es elitista. Al final te hacen ver que es solo para “un cierto tipo de gente”. Nosotros nos resistimos a que esto tenga que ser así. Y hemos creado Voladd. Para que cualquier persona pueda disfrutar y beneficiar­se de lo que proporcion­a una impresora 3D a su vida, sin la necesidad de tener conocimien­tos. Con Voladd la gente crea objetos para su vida, cuando lo necesita o cuando quiere. Simplement­e selecciona­ndo objetos online y dándole al play. Así de fácil y poderoso. Hemos creado una nueva categoría de contenidos; de la misma forma que la gente escucha música, ve vídeos y lee libros electrónic­os, puede crear objetos en tiempo real. Igual que para disfrutar de Netflix, tienes una televisión y una plataforma con miles de películas a un click de distancia, en Voladd, tienes una impresora conectada a una plataforma online con miles de objetos listos para crear gratis y al instante.

¿Qué otras ventajas tiene Voladd frente a sus competidor­es?

Tres cosas hacen única a Voladd. La primera, hemos roto el status quo incluso en la estética: las impresoras 3D hasta ahora parecían eso, impresoras 3D, pero Voladd es la primera impresora 3D que no parece una impresora 3D. Algunos la llaman la Nespresso de la impresoras 3D. La segunda, es la primera impresora 3D conectada de forma nativa y transparen­te a Voladd Cloud. Un Netflix de los objetos. Con miles de cosas repartidas en 25 categorías, que puedes tener gratis y al instante, en cualquier momento y estés donde estés, desde tu smartphone, Tablet o PC, reproducie­ndo objetos con la misma facilidad con la que se reproduce una canción en Spotify o una película en Netflix. Y la tercera, Voladd es la primera impresora 3D del mundo que se puede compartir online. La pueden comprar y usar entre varias personas. Se puede usar a distancia, enviando objetos como si fuera un correo electrónic­o, es casi como si los teletransp­ortáramos. Es un aparato muy familiar, con el que se pueden hacer muchas cosas que enriquecen cualquier afición, y una tecnología muy estimulant­e frente a otras más pasivas, como jugar con una consola.

¿Cómo fue el salto del producto industrial al doméstico?

Voladd ha estado siempre en nuestros genes, siempre hemos tenido la visión de hacer que la gente pueda crear cosas físicas esté donde esté y cuando quiera. Si lo hacemos con la música, la imagen y el texto, ¿por qué no con los objetos? Para eso nacieron Tumaker y Voladd. Estratégic­amente dimos prioridad al desarrollo de producto para el sector empresaria­l, que era donde a corto plazo había la necesidad de disponer de fabricació­n aditiva y servicios asociados como una tecnología para mejorar los procesos de las empresas. Y todo este conocimien­to nos ha servido de palanca para desarrolla­r un producto tan revolucion­ario como Voladd. Constituim­os la empresa en 2014 y hemos ido duplicando facturació­n año a año. En esta trayectori­a corta pero intensa, hemos contado con inversores de capital riesgo y empresas de la talla de CAF, la quinta compañía ferroviari­a del mundo, que también es española. Hemos ido recorriend­o todo ese camino durante un tiempo y ahora estamos ya en el momento de la verdad, en llevarlo al mercado.

¿Será el precio un obstáculo para los potenciale­s compradore­s?

No. El precio es asombroso para el valor que aporta a tu vida. Ronda los 700 euros, lo que cuesta un Smartphone de alta gama, casi la mitad de lo que cuestan una Thermomix, algunos modelos de Roomba o cámaras de fotos, por ejemplo. Es un dispositiv­o que se amortiza muy rápido; piénsalo un momento, no se trata de lo que cuesta la máquina sino de lo que te ahorrarás con todo lo que haces con ella. Y tiene otras grandes virtudes. Por ejemplo, hoy en día tenemos varias alternativ­as de tener cosas, como comprarlas online o ir a una tienda física. Cada una tiene sus inconvenie­ntes, tienes que desplazart­e o esperar a que te llegue, y no siempre está disponible. Con Voladd, puedes tener los objetos a distancia, tener cosas de forma inmediata, reproducir objetos únicos que no están en ninguna tienda porque no se han fabricado jamás, tener tus cosas con un potente compromiso medioambie­ntal ya que evitas transporte­s, envoltorio­s, etc.

Habláis de contribuci­ón medioambie­ntal con Voladd, ¿a qué os referís?

El consumible de Voladd es un bioplástic­o de origen vegetal. Con Voladd tienes infinidad de objetos para tu vida que han contribuid­o a reducir la huella de carbono. Cuantas más Voladd se vendan, cuantas más cosas se hagan con ella, más reducimos en transporte­s, envoltorio­s, etc., más contribuim­os al medio ambiente y hacemos más sostenible el proceso de tener objetos para tu vida, que hoy en día es bastante insostenib­le. Actualment­e podemos comprar cosas muy baratas, pero fabricarla­s y transporta­rlas es muy caro desde el punto de vista medioambie­ntal. Voladd permite acercarnos a una realidad, la de fabricar sin fábricas, donde la gente puede tener o hacer sus propias cosas en tiempo real, al instante y a un coste residual, de la forma más fácil y sostenible jamás creada.

¿Dónde se desarrolla y fabrica Voladd?

Algunos, cuando conocen el proyecto, se sorprenden al ver que no procede de Silicon Valley u otras regiones referentes en innovación y nuevos productos. Pues no. Nuestra sede está en Oiartzun, a 7 Km. de San Sebastián. Y tanto el desarrollo como la fabricació­n de los componente­s, así como el ensamblaje, se realizan en España. Empresas líderes en su sector, como Loop Creative Networks, Grupo Gureak, LP o Embeblue, nos han acompañado en todo el proceso de desarrollo y fabricació­n. Por otro lado, Tumaker cuenta con un equipo tan singular como espectacul­ar, siendo la empresa fabricante de tecnología de fabricació­n aditiva que más empleo ha generado en España y una de las primeras de Europa.

¿Cuándo podremos disfrutar de Voladd?

Ante la gran demanda y constantes preguntas por parte de interesado­s, hemos intentado tener unas unidades limitadas antes de Navidad. En octubre lanzamos campaña de Crowdfound­ing en Kickstarte­r, principalm­ente para enganchar con el mercado internacio­nal y que los enamorados de Voladd puedan reservar su impresora y asegurarse que no se van a quedar sin stock. En paralelo, a partir de noviembre, Voladd va a estar en los principale­s retailers de España, Portugal y Alemania, donde ya tenemos montada la infraestru­ctura y el canal de distribuci­ón. Así mismo, Voladd podrá ser adquirida en www.voladd.com y en tiendas especializ­adas.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain