La Vanguardia

Niebla en el canal

El débil liderazgo de May inquieta a la UE, que se prepara para aplazar el calendario de negociació­n del Brexit

- BEATRIZ NAVARRO

La fecha del 4 de octubre estaba marcada en rojo en el calendario de Michel Barnier, el metódico negociador europeo del Brexit. La primera ministra británica, Theresa May, debía pronunciar el discurso estrella de la conferenci­a del partido conservado­r británico. Las dudas se amontonaba­n en Bruselas. ¿Se atendría May a las señales de apertura lanzadas en los últimos días o daría marcha atrás? ¿Lograría reafirmar su autoridad entre sus compañeros de filas y dar garantías de que lo que negocie en Bruselas será aceptado en Londres? La niebla en el canal no se ha despejado.

Para alivio de los Veintisiet­e, la primera ministra británica no ha dado marcha atrás respecto a la posición negociador­a que expuso en Florencia hace unas semanas, más conciliado­ra, pero la alegría no es completa. Su liderazgo sigue siendo débil, los rumores de conspiraci­ones no callan y no hay garantías de que las negociacio­nes vayan a coger la velocidad de crucero necesaria para llegar a un pacto a tiempo. El negociador británico, David Davis, ha vuelto a decir esta semana que están preparados para un escenario de no acuerdo. “Si el resultado de la negociació­n está por debajo de lo que el Reino Unido necesita, estaremos listos para la alternativ­a”, ha advertido.

Quedan 18 meses para que se ejecute el Brexit (el 29 de marzo del 2019, más dos años de transición si los Veintisiet­e aceptan la petición de Londres). La fecha se acerca peligrosam­ente sin que se hayan registrado apenas avances en la negociació­n de los términos del divorcio. Mañana comienza la quinta ronda de negociacio­nes en un mes decisivo, porque los Veintisiet­e deben determinar en unas semanas si ha habido avances suficiente­s en los tres asuntos clave del divorcio (los derechos ciudadanos, el arreglo financiero y la frontera con Irlanda).

En Londres ven el vaso medio lleno. En Bruselas, medio vacío. Barnier compareció esta semana para hacer balance de las negociacio­nes con la Eurocámara, que tendrá derecho de veto sobre cualquier acuerdo de salida que los gobiernos pacten con Londres. Las conversama­ción, ciones, lamentó, no han permitido apenas avanzar sobre los derechos de los ciudadanos ni sobre los temas financiero­s y por el momento no puede recomendar pasar a la segunda fase de la negociació­n, prioritari­a para Londres, tal y como se pretendía para dejar tiempo suficiente para hablar del acuerdo comercial y asociación futuro. El Parlamento Europeo concluyó que “a no ser que haya un gran avance “en la ronda negociador­a que mañana se abre en Bruselas no se debería empezar a hablar del acuerdo comercial futuro que regirá las relaciones entre las dos partes. La esperanza, explican fuentes diplomátic­as, es poder dar el paso en la cumbre de diciembre.

May no sólo tiene problemas dentro de su partido para definir sus posiciones negociador­as. Las elecciones anticipada­s celebradas en junio, lejos de servirle para reforzar su mayoría parlamenta­ria, la dejaron a expensas del apoyo del partido norirlandé­s DUP. La for- defensora del Brexit, exige a la vez que cuando entre en vigor, la hoy inexistent­e frontera entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda sea “lo más libre de ficciones posible”. El gobierno británico también desea que no haya lindes físicos pero, al mismo tiempo, quiere quedarse fuera de la unión aduanera europea, lo que implica algún tipo de controles a las mercancías entre el club y los países terceros. A May le correspond­e dar con la fórmula para la cuadratura del círculo.

“Nos interesa profundame­nte que las negociacio­nes lleguen a buen puerto pero sé que algunos están preocupado­s por si estamos o no preparados en caso de que esto no ocurra”, dijo May a los delegados de la conferenci­a del partido conservado­r británico en Manchester. “La tarea del gobierno es prepararse para cualquier eventualid­ad y permítanme asegurarle­s que eso es exactament­e lo que estamos haciendo”.

La angustia por el rumbo de las negociacio­nes empieza a cundir entre las empresas europeas. “Después de cuatro rondas de negociacio­nes, observamos con preocupaci­ón la marcha de las negociacio­nes del Brexit”, ha declarado esta semana el director de la Federación de Industrias de Alemania, Joachim Lang, que no cree que el Gobierno británico tenga “un concepto claro” del Brexit. El lobby ha recomendad­o a sus socios preparar planes de contingenc­ia para “una posible salida muy dura” de la UE porque “lo contrario sería pecar de ingenuos”. A pesar de las dudas de algunos sobre su postura, la Federación respalda la estrategia negociador­a europea: “Dejémoslo claro. Sí, la industria alemana quiere mantener una relación estrecha con el Reino Unido. Pero que no quepa ninguna duda: damos prioridad al desarrollo de la UE”, remató Lang en Berlín. Barnier había dicho algo parecido en Estrasburg­o: “Nos importa más el futuro de la UE que el Brexit”.

Tres asuntos clave del divorcio: derechos de los ciudadanos, pacto financiero y la frontera con Irlanda

Arranca en Bruselas la quinta ronda negociador­a sin que haya avances claros sobre los puntos clave

 ?? VIRGINIA MAYO / AP ?? El futuro de Europa depende de la negociació­n, ahora estancada, sobre la salida del Reino Unido de la UE
VIRGINIA MAYO / AP El futuro de Europa depende de la negociació­n, ahora estancada, sobre la salida del Reino Unido de la UE

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain