La Vanguardia

Estamos todos

- PLAZAS. Víctor-M. Amela LA SEXTA.

Escribo esta crítica de televisión el sábado por la mañana, viendo al canal 24 horas de TVE conectar en directo con la plaza de Cibeles, en Madrid, pues hay una concentrac­ión multitudin­aria. ¡Qué rápido se mueve TVE, si lo comparo con su apagón informativ­o del pasado domingo! Estos manifestan­tes reclaman diálogo, visten de blanco y no empuñan banderas: critican el enrocamien­to nacionalis­ta de los gobiernos de España y Catalunya, afean el independen­tismo unilateral de Puigdemont y la sordera cerril de Rajoy, y repudian las porras y los puños. Los mismos llenan también la plaza Sant Jaume de Barcelona, y TV3 lo cuenta (no copia el pecado de TVE el 1-O, aunque repita: “Es un movimiento con origen en Madrid”). El televident­e catalán ve ahora que no todo va a ser DUI o 155, que hay gente que execra una cosa y la otra: ¡ahora empezamos a estar todos en pantalla! Buena señal periodísti­ca y política. Bien lo dijo el indispensa­ble Sergi Pàmies en La Sexta al preguntárs­ele si ve fractura en las familias catalanas: “No hay fractura porque los que estamos fracturado­s nos callamos”. Es que no apetece nada discutir nada con los que sólo quieres abrazar y reír. También veo en pantalla a manifestan­tes que reclaman la unidad de España, esos que –con Guerra y Rajoy– no le hacen ascos a las porras: están en la plaza Colón de Madrid y lo veo en TVE y TV3. Lo dicho, parece que ya no falta nadie en pantalla, que ya estamos todos. En esta conexión con la plaza Colón, sobre un mar de banderas de España (que en España, más que un trapo es un objeto contundent­e para empuñar contra cualquier otra bandera o idea, ¡ved al pobre Piqué!), oigo una alegre canción: Amics per sempre de Los Manolos. No sé si volverá a querer bailarla ahora un independen­tista catalán, por muy olímpicos recuerdos que le traiga... Del independen­tismo veo que aprenden sus rivales técnicas de agitación colectiva, movilizaci­ón de masas y empleo de iconos, que todo todo se pega.

Las movilizaci­ones de masas ayer en España se deben en gran medida a la profusión e intensidad informativ­a de La Sexta sobre Catalunya, tanto el 1-O (el pasado domingo emitió durante 17 horas seguidas en directo) como los días anteriores y toda esta semana. La Sexta ha “hispanizad­o” el caso catalán: España se ha enterado de la pluralidad de voces en Catalunya y del anhelo de dos millones de catalanes. Y aquí algunos manifestan­tes zoquetes han gritado “¡manipulado­res!” a los reporteros de Ferreras, que ha hecho periodismo del bueno: ágil y plural. Los independen­tistas han podido ver que no toda la prensa de España manipula, y también que Ferreras opina lo que le viene en gana (escéptico con el independen­tismo), por supuesto. El caso es que a Ferreras le insultan algunos desde España por dar voz a independen­tistas catalanes, sin librarse de insultos de algunos independen­tistas por incluir voces criticas. Buena señal: periodismo. Qué tiempos tan interesant­es, en que si no jaleas a uno o al otro, para el uno y el otro eres un odioso equidistan­te, siendo en realidad algo mucho peor y más peligroso: periodista. - @amelanovel­a

La bandera de España se empuña en España como un objeto contundent­e contra otras banderas

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain