Foment llama a “no avanzar ni un paso más por un camino incierto”
La patronal alerta de la fuga de “centenares de empresas, que podrían ser miles”
La crisis que vive Catalunya, a pocas horas de la celebración de un pleno en el Parlament en el que podría declararse la independencia, llevó ayer a Foment del Treball a hacer una declaración oficial, acordada en un comité ejecutivo reunido con carácter de urgencia por la tarde, en la que alerta de las “graves consecuencias” que tendría una salida unilateral de este tipo. Por ello, hace una llamada a la “responsabilidad y al diálogo” a los dirigentes políticos, a los que insta a “no avanzar ni un paso más en el incierto camino” iniciado. Continuar por esta senda, advierte, “tendría unas consecuencias irreparables para Catalunya y España”. En este sentido, la entidad empresarial insta a “evitar los enormes daños que está provocando esta deriva” y a “reconducir cuanto antes la situación desde el respecto a legalidad”.
La patronal, que hasta ayer no había manifestado su posición sobre la situación, muestra su preocupación por la evolución de los acontecimientos después de la celebración del referéndum del 1-O suspendido por el Tribunal Constitucional. La decisión de un gran número de compañías –“centenares, que podrían ser miles”, asegura– de trasladar sus sedes sociales fuera de Catalunya, ha encendido todas las alarmas en el mundo económico. En este sentido, la entidad que preside Joaquim Gay de Montellà, recuerda que “sin empresas no hay país y perderlas nos empobrece”.
La reacción de las empresas, prosigue la organización referente en Catalunya de la CEOE, “algunas de ellas protagonistas esenciales de nuestra historia empresarial”, es un “reflejo claro del grado máximo de preocupación” que existe en este ámbito. Foment afirma que los responsables de estas compañías “se sienten obligados” a tomar las citadas decisiones y que lo hacen con “enorme tristeza y dolor”. La razón del traslado de las sedes es, apostilla, “proteger los intereses de sus clientes, empleados y accionistas”.
El impacto económico de esta crisis es fuerte, advierte Foment del Treball. “Sectores industriales importantes suspenden nuevas inversiones” y “las reservas turísticas se hunden en un 50% respecto a sus niveles habituales de ocupación”. Asimismo, la entidad alerta de que “numerosos clientes de fondos de ahorro y de inversión trasladan sus cuentas fuera de Catalunya”. También lamenta que “sindicatos absolutamente minoritarios convocan continuamente huelgas generales destinadas a servir de base a la perturbación continuada del orden laboral y la vida ciudadana”.
Foment recuerda que esta “grave situación social y económica que vive Catalunya se ha visto motivada por las circunstancias del entorno político”, que “ha ido derivando en un camino de incertidumbre” desde diciembre de 2015, cuando Junts pel Sí negoció la investidura de Artur Mas con la CUP, que acabó fracasando y dio paso al acuerdo por el que Carles Puigdemont accedió a la presidencia de la Generalitat. Únicamente, prosigue el comunicado de la patronal, “la fortaleza de la economía española, en general, y de la catalana, en particular, ha permitido resistir durante el 2016 y el 2017, hasta los tristes hechos del 17 de agosto” (los atentados yihadistas de Barcelona y Cambrils).
“El incierto camino elegido por las fuerzas políticas con una estrecha mayoría en el Parlament –prosigue Foment– durante septiembre ha traspasado fronteras de ilegalidad conduciendo al país hacia el descrédito nacional e internacional y quien sabe si a la insolvencia económica”. Por ello, llama a “afrontar este momento desde la legalidad que ampara la Constitución y el Estatut”. Y advierte de que “cualquier decisión que se tome al margen sólo nos conducirá todos a la pérdida de actividad económica y del tejido empresarial” así como a un “incremento de la tensión política e institucional, ahora ya muy elevada”.
La entidad insta a “reconducir cuanto antes la situación desde el respeto a la legalidad”
Las empresas “se sienten obligadas” a trasladar las sedes, y lo hacen con “enorme tristeza y dolor”