Un doblete de Suárez sitúa a Uruguay entre los grandes

ta reveló que Lavezzi se había fumado un porro en la concentración.

El fin de la huelga permitió escuchar al ídolo ejerciendo de nuevo como capitán. “Creo que todo este momento que estuvimos un poco alejados de la prensa y de la gente sirvió para acercarnos más; después de esto creo que es importante que nos unamos, todos queremos que a la selección le vaya bien”, declaró el crack. “Hace tiempo que varios de este grupo vienen siendo discutidos a pesar de haber jugado tres finales importantísimas”, añadió. “Hubiese sido una locura que Argentina no esté en el Mundial, no nos merecíamos eso”, añadió. “Hu-

bo cambio de técnico, que siempre es difícil volver a empezar de cero, adaptarte a una nueva idea, una nueva filosofía”, sostuvo. “Estaba el miedo de quedar afuera”, concluyó.

Un miedo instalado en la sociedad argentina. Tras el partido el presidente Mauricio Macri telefoneó al crack para darle las gracias. El mandatario vio el partido con su familia en la residencia de Olivos, pero en el descanso se acercó a saludar a un grupo de altos funcionarios reunidos para ver el encuentro en un edificio del complejo presidencial. “El que ahora discuta a Messi no existe”, amenazó Macri, bromeando, según recoge Clarín.

Todo vuelve a la normalidad en Argentina. Aunque buena parte de la prensa es consciente de que solo con Messi no será suficiente, ya hay voces exitistas que se ven en la final de Moscú. La memoria empieza a flaquear, como demostraban los hinchas del Obelisco que, resucitados, ya entonaban el Brasil decime

que se siente, sin agradecer que los brasileños, con su triunfo ante Chile, ayudaron a la clasificación argentina.Luis Suárez, amigo de Messi, endosaba por su parte dos goles a Bolivia (4-2) para clasificar a Uruguay. Ambos se verán en Rusia.