Lewis Hamilton llama a la puerta de los mitos
El inglés de Mercedes puede coronarse hoy tetracampeón de F-1 en Austin si vence y falla Vettel
Lewis Hamilton (32) tiene una cita con la historia hoy en Austin (21.00, hora española), a falta de cuatro carreras para el final del Mundial. El mismo escenario, el Circuito de las Américas, donde se coronó por tercera vez hace dos años, puede ser la alfombra roja que le conduzca al exclusivo club de los pilotos con más títulos de F-1, junto a Michael Schumacher (7), Juan Manuel Fangio (5), Alain Prost (4) y su coetáneo Sebastian Vettel (4). Le basta con sumar 16 puntos más que su rival alemán de Ferrari. Combinaciones, sólo dos posibles
(véase cuadro). Ambas complicadas, pero factibles: las vivió este año en tres ocasiones, en Silverstone (1.º-7.º), en Singapur (1.º-abandono) y en Suzuka (1.º-abandono).
Ha sido precisamente este bache inesperado en el rendimiento de Ferrari en las tres últimas carreras de la gira asiática (Singapur, Malasia, Japón), en las que Vettel sólo ha sumado 12 de los 75 puntos posibles, lo que ha disparado a Hamilton hasta las puertas de su cuarto título mundial. Hasta Italia, la última carrera en Europa, Vettel había comandado la general con autoridad durante 12 grandes premios.
Llegó incluso a acumular 25 puntos de renta (después de Mónaco) y en Ferrari comenzaron a soñar con un título que se les resiste desde el 2007, aquel que ganó de carambola Räikkönen en Brasil a Hamilton y a Fernando Alonso.
Pero después del verano el campeonato dio un vuelco.
La mejor evolución de Mercedes que la de Ferrari, la determinación de Hamilton buscando la victoria (4 en las últimas 5 carreras), la falta de fiabilidad del coche rojo a la hora de la verdad (roturas en la qualy de Malasia y en la carrera de Japón) o la mala fortuna puntual (la salida catastrófica de Singapur), han dejado el trono preparado para el piloto inglés, con 59 puntos de ventaja.
“Siento que ha subido de nivel; es el quinto año que trabajamos juntos y ha dado un gran paso adelante, tanto dentro como fuera del monoplaza”, aplaudía a Hamilton su jefe deportivo, Toto Wolff, que considera que el inglés está en el mejor momento de su carrera. Con 32 años, está a las puertas de apuntarse su cuarta corona, igual que había hecho Michael Schumacher, al cual podría alcanzar si Mercedes sigue siendo el bólido superior y más fiable hasta que cambie la normativa de motores híbridos (en el 2021).
En Mercedes confían plenamente en que Hamilton no dejará escapar su primer match-ball este domingo. Como ya hizo en el 2015. Entonces afrontaba su primera oportunidad para el tricampeonato –también en Austin y a falta de cuatro carreras– con 66 puntos sobre Vettel y 73 sobre Rosberg. Más renta que ahora. Le bastaba con ganar y que Seb no fuese segundo. Pero lo que más inquietaba al inglés era el huracán Patricia, que impidió que se disputase la qualy el sábado y que amenazaba con enloquecer la carrera. Le salió a pedir de boca: Rosberg, con la pole, se fue fuera en la primera curva al resbalar en la pista todavía mojada, Lewis tomó el mando, y pese a los bailes de posiciones a causa de dos coches de seguridad, Vettel acabó tercero, detrás de Nico. La parrilla de salida de este domingo la encabezará Hamilton, que se llevó la pole (la undécima que logra este año) por delante de Vettel, lo que hace prever una carrera muy reñida.