Las vergüenzas del PP en tres días
La fiscal Concepción Sabadell cree demostrada la corrupción en el largo informe de conclusiones del caso Gürtel
La fiscal Concepción Sabadell, encargada del caso Gürtel, concluyó ayer en la Audiencia Nacional su informe-río de tres días de duración, en el que no ha dejado títere con cabeza, considerando probado que el PP tuvo una contabilidad B y que su extesorero, Luis Bárcenas, la manejó a su antojo, en beneficio propio y de su partido. Y por si al relato pormenorizado de la fiscal le hubiera faltado algún colofón, la guinda –y algo más– la puso ayer la Abogacía del Estado, cuyo representante, el jefe de lo penal, Edmundo Bal, pidió a la Audiencia “una sentencia ejemplar”. ¿Para qué? Para que en el futuro si “algún empresario español” tiene la “tentación” de sobornar a un político a cambio de contratos, se diga: “Jolín, ¡qué miedo me da la cantidad de años de cárcel que le han caído a estas personas!”.
Edmundo Bal fue contundente, pero la fiscal Concepción Sabadell, que no le fue a la zaga, fue además muy exhaustiva y minuciosa. Repasó a lo largo de tres jornadas todos los aspectos del caso Gürtel, en el bien entendido de que en este juicio se analizaba la primera etapa de las actividades de la trama, centrada en los episodios de corrupción registrados en los municipios madrileños de Majadahonda y Pozuelo de Alarcón.
Al respecto la fiscal Sabadell no se quedó en la superficie ni en las anécdotas, sino que fue al fondo de la cuestión. El apunte de Luis el cabrón, por ejemplo, que apareció en uno de los registros de las oficinas de la red, lo identificó sin duda alguna con Bárcenas, lo consideró absolutamente probado, y de ello derivó toda una serie de consecuencias que sitúan al extesorero del PP al mando de la contabilidad paralela de los populares.
Lo importante, por tanto, no es sólo que el PP aparezca en este juicio como responsable a título lucrativo por unos ingresos conseguidos en los dos municipios citados y para sufragar sus campañas electorales en ambos. Lo más relevante es que, de acuerdo con la fiscal, se haya demostrado que la red Gürtel se valió de “un entramado societario” que usó “una caja B, una tesorería oculta, que se nutría de ingresos de las sociedades de Correa –el cabecilla de la trama– y de comisiones ilegales y que generaba dinero negro, opaco a Hacienda, para sobornos a autoridades públicas, en dinero en metálico o en forma de viajes pagados”.
La fiscal volvió ayer sobre esta idea para concretarla respecto del excalcalde de Pozuelo, Jesús Sepúlveda,
La Abogacía del Estado se suma a las acusaciones de la Fiscalía y pide una sentencia ejemplar
y su exesposa, Ana Mato, exministra de Sanidad. Concepción Sabadell les citó como ejemplo de las maniobras de Gürtel, al conseguir contratos en Pozuelo y retribuirlos con regalos a Sepúlveda y Mato.
Para Anticorrupción, en todo caso, lo más grave es que, como considera “plena y abrumadoramente” demostrado, el PP tuvo una caja B, de la que su extesorero se valió para enriquecerse, burlando a Hacienda y consiguiendo esconder dinero. Y citó que a pesar del embargo de cuentas, Bárcenas ha podido ocultar no menos de 4.100.000 euros del total que ocultó en Suiza y que jamás se han llegado a encontrar.