Al Jelaifi se defiende
El presidente del PSG declara en Suiza por un presunto soborno
“No tengo nada que esconder”. Con esta seguridad, cierta o impostada, apareció el qatarí Naser al Jelaifi al término de su larga declaración ante la fiscalía de la Confederación helvética, en Berna. El presidente del París Saint Germain y director general de Bein está siendo investigado por la venta de los derechos de televisión de los Mundiales de fútbol del 2026 y el 2030, en una trama que también sitúa bajo sospecha al exsecretario general (20072015) de la FIFA Jérôme Valcke.
“He venido a Suiza a ofrecer mis explicaciones. He contestado las preguntas que se me han realizado, no tengo nada que esconder. Estoy dispuesto a hacerlo cuando sea necesario, quedo a la disposición de la fiscalía suiza si quiere que amplíe las declaraciones. He llegado con total tranquilidad y me voy con la misma calma”, señaló Al Jelaifi a su salida de las dependencias suizas.
Esta declaración debía haberse realizado el pasado 12 de octubre, pero el dirigente del PSG no se hallaba en París sino en Doha en aquella fecha, que fue cuando se realizaron registros en la sede francesa de beIN Sports, en las afueras de la capital francesa.
También el 12 de octubre prestó declaración Valcke, en Suiza, y al día siguiente se llevó a efecto un registro en una mansión residencial de Porto Cervo, en Cerdeña, valorada en 7 millones de euros y que supondría, según las investigaciones, el efecto del soborno utilizado por Al Jelaifi con Jérôme Valcke. Según las investigaciones de la policía italiana, que interrogó a ocho personas, la mansión pertenece oficialmente a una compañía inmobiliaria multinacional. Otras posesiones fueron registradas esos mismos días en Grecia y España.
La declaración del dirigente
CALMA APARENTE
“He contestado las preguntas y estoy dispuesto a hacerlo cuando sea necesario”
del PSG dio comienzo a las nueve y media de la mañana y se dio por concluida cerca de las siete de la tarde. Al Jelaifi acudió acompañado de un equipo de juristas, franceses y suizos, para defender sus derechos.
Valcke quedó relevado de sus funciones en la FIFA en septiembre del 2015 y en febrero del 2016 quedó suspendido durante doce años por la comisión de Ética de la FIFA. Según el equipo de abogados que ha investigado las cuentas del organismo del fútbol, Valcke formó parte de los dirigentes que percibieron más de 71 millones de euros entre el 2010 y el 2015. Los documentos de esta investigación se trasladaron entonces a las justicias suiza y estadounidense.
El portavoz de la fiscalía suiza, André Marty, avisó ya a primera hora que “el mundo del fútbol deberá tener paciencia ante los resultados de este caso” y más tarde aclaró que “estas investigaciones criminales suelen tardar años, no meses”.