Ocho maestros declararán por “incitación al odio”
La denuncia fue interpuesta por familias de guardias civiles
El juzgado de primera instancia e instrucción de la Seu d’Urgell ha citado a declarar el próximo martes, 7 de noviembre a ocho profesores de tres escuelas de la localidad ante una denuncia interpuesta por padres de alumnos por un posible delito de incitación al odio por la manera como los docentes abordaron en clase la información sobre el referéndum del pasado 1 de octubre.
La causa fue abierta después de que tres familias de guardias civiles denunciaran ante el cuartel del instituto armado de La Seu, denuncias en este sentido, que luego fueron ratificadas ante el juzgado. En concreto se denunciaba a la escuela Mossèn Vives porqué una profesora había hablado en clase de las cargas policiales y posteriormente uno de los alumnos habría sufrido “humillaciones, insultos e incluso agresiones” porque su madre es guardia civil, lo que conocían el resto de compañeros y profesores. Estos hechos se habrían producido el 3 de octubre y según relata la denuncia las supuestas humillaciones habrían sido “incitadas” por el director de la escuela y dos profesores del centro escolar.
En concreto, según un comunicado del TSJC, “podría ser que varios profesores y el director incitaran de manera directa a los alumnos, de edades muy tempranas y, en consecuencia, maleables por parte de quien tiene un principio de autoridad para con ellos, a la comisión de hechos mínimamente concretados en los que se pueda predicar la discriminación, el odio, la hostilidad o la violencia contra grupos o asociaciones”.
El director de la escuela, Isidor Alberich, negó ayer totalmente las acusaciones en una entrevista concedida al programa Via Lliure de Rac 1. “No ha pasado nada de lo que se indica en la denuncia, nosotros nos dedicamos a dar clase, a trabajar el día a día, a enseñarles valores a los alumnos, y no nos dedicamos a hacer debates políticos ni mucho menos. Ni lo hemos hecho el 2 de octubre, ni ningún otro día. Y las otras escuelas de La Seu estoy seguro de que tampoco, porque bastante tenemos como para dedicarnos a tocar un tema como este y más en un nivel de primera enseñanza, con niños de 3 a 12 años”.
Ante las primeras quejas de las familias, el Departament d’Ensenyament envió a sus inspectores que realizaron un informe, que el mismo director habría entregado a la Guardia Civil. “Desconozco el contenido exacto de la denuncia. Para nosotros es una sorpresa porqué la convivencia es muy buena”. Las denuncias han causado sorpresa e indignación en buena parte de la comunidad educativa de la capital del Alt Urgell, que ha recogido hasta 180 firmas de apoyo a los profesores.