Un líder xenófobo checo pide que judíos, gais y gitanos sean “gaseados”
“Los judíos, los gais y los gitanos deberían ser gaseados”. Así lo dijo el secretario general del partido checo de ultraderecha Libertad y Democracia Directa, Jaroslav Staník, en una trifulca con la ministra de Trabajo y Asuntos Sociales en uno de los restaurantes del Parlamento, según informaron medios de Praga.
Jaroslav Staník vio aparecer en el comedor a la ministra, la socialdemócrata Michaela MarksovaTominova, y se dirigió a ella de esta manera: “Usted es la ministra Marx-Engels, la que apoya a los homosexuales”. Según la ministra, Staník, que estaba bebido, añadió que los gais deberían ser “gaseados” y ella le recriminó por ello. Pero Michaela Marksova-Tominova no se encontraba sola. El diputado Marek Cernoch y otros testigos aseguraron que Staník “pidió que todos los homosexuales, gitanos y judíos fueran muertos a tiros ya de recién nacidos, y además atacó verbalmente a las mujeres presentes con insultos groseros”. Precisamente la ONU acaba de pedir a la República Checa una mayor integración de la población romaní.
Requerido por el portal Aktualne.cz, Staník no quiso hacer declaraciones pero más tarde envió un mensaje de texto negándolo todo y diciendo que se trataba de “una mentira de rivales políticos desesperados”. En parecido sentido se pronunció en Facebook el líder y fundador de su partido, Tomio Okamura, un empresario nacido en Tokio, de quien Stanik está considerado su mano derecha.
En las elecciones del pasado mes de octubre los euroescépticos y xenófobos de Libertad y Democracia Directa obtuvieron el 10,64% del voto, lo que les dio 22 escaños en la cámara baja del Parlamento, de 200 diputados. El ganador fue el partido asimismo populista y “antisistema” Alianza de los Ciudadanos Descontentos (ANO), que fue creado por el millonario Andrej Babis, poseedor de la segunda fortuna del país y hoy primer ministro.