La defensa belga jugará la carta del juicio político
“Se les persigue sólo por sus opiniones políticas”, asegurarán los abogados de los políticos huidos
Un ajuste de cuentas político y no un juicio justo: es lo que la defensa de Carles Puigdemont y los cuatro exconsellers huidos en Bélgica asegurará que les espera si son entregados a España.
Los abogados del expresident, Toni Comín, Clara Ponsatí, Meritxelle Serret y Lluís Puig han coordinado sus estrategias de defensa de cara a la audiencia que tendrá lugar mañana en Bruselas. Su objetivo, más que centrarse en cuestiones técnicas como la ausencia de un equivalente exacto en el Código Penal belga de los delitos que se les imputa en España, pasa por jugar a fondo la carta del proceso
político, según han explicado los letrados belgas a varios medios internacionales.
“España no apunta a ningún hecho individual punible, sino a sus decisiones políticas, que todo el mundo conocía y para las que fueron democráticamente elegidos”, defenderán los abogados de los cinco miembros del Govern cesado refugiados en Bélgica. “Se les persigue únicamente por sus opiniones políticas. El juez belga debe denegar la entrega”, afirma la defensa, según el diario belga De
Standaard.
El riesgo de violación de los derechos humanos fue el argumento clave por el que el abogado de Puigdemont, Paul Bekaert, logró hace tres años evitar la extradición de una miembro de la banda terrorista ETA, residente en Gante, que llevaba más de 30 años huida de la justicia. Fue un caso excepcional. La jurisprudencia europea indica que se debe argumentar la existencia de un riesgo concreto y grave para la persona, en caso de ser entregada al país que la solicita.