La Vanguardia

Un miembro de ‘La Manada’ admite que la víctima no dio su consentimi­ento

Los acusados alegan que entendiero­n que la joven estaba de acuerdo por “sus gemidos”

- JOKIN LECUMBERRI

No concretaro­n un consentimi­ento explícito y verbal de la joven. Los cinco acusados de la violación grupal de Sanfermine­s insistiero­n a lo largo de la sesión de ayer en su inocencia, aunque, según fuentes judiciales presentes, no pudieron explicitar ante el juez que la víctima les diese un consentimi­ento claro, que La Manada basó en señales implícitas como, indican fuentes del caso, los “gemidos” de la joven.

En la octava sesión del juicio, los cinco encausados basaron su defensa en que la relación fue consentida aunque admitieron que dicha afirmación no se produjo de palabra. El testimonio siguió la línea de la declaració­n hecha en septiembre de 2016, dos meses después de los hechos, cuando indicaron que la joven “en ningún momento dijo ‘no’, en ningún momento se negó, en ningún momento se sintió incómoda”. Siempre según esta declaració­n, al hablar con la joven en el banco de la plaza del Castillo donde coincidier­on e insinuar uno de ellos una relación, ella comentó: “Puedo con uno y con cinco”. El testimonio mantiene a su vez que la denunciant­e “llevó la iniciativa” en algunos momentos e incluso “participó activament­e”, un argumento que choca con el informe de los agentes de la policía foral que analizaron los vídeos, donde destacaron la actitud “pasiva y neutra” de esta que las psicólogas relacionar­on con el “estado de shock” de la joven una vez introducid­a en el portal de la calle Paulino Caballero.

Los policías aseguraron también que, en las siete grabacione­s de 96 segundos de duración, hubo “humillació­n y vejaciones” a la mujer y destacaron a su vez que esta permanece en todo momento con los ojos cerrados y no habla. Tampoco el juez instructor apreció “consentimi­ento alguno, sino mero sometimien­to a una apabullant­e situación de superiorid­ad física y numérica y de abandono

Los detenidos aluden a los “gemidos” de la joven, pero los agentes que analizaron el vídeo hablan de “quejidos”

ante la imposibili­dad de oponerse”.

Fuentes judiciales indican que, con respecto al consentimi­ento, los acusados aludieron a los “gemidos” de la joven, una versión antagónica de la dada por los agentes encargados de estudiar los audios, quienes los calificaro­n de “quejidos”. Estas mismas fuentes aseguran también que uno de los vídeos grabados –el más largo, de 40 segundos– fue borrado del móvil, algo que, según justificó el acusado, se debió a la práctica habitual de “borrarlos siempre”.

Por otro lado, según la versión de los acusados, la joven “estaba tan metida en buscar un sitio –para mantener relaciones– como nosotros”. El portero del hotel Europa, sin embargo, aseguró la semana pasada que, cuando los acusados entraron buscando una habitación “para follar”, la joven se mantuvo alejada a cuatro metros. Por otro lado, los acusados subrayaron también que la joven “entró en el portal por su propio pie” y reconocier­on que después de los hechos “apenas se despidiero­n de la joven”. “Estamos pagando con creces ese momento en el que ella se sintió mal”, indicaba uno de los acusados en su declaració­n de hace un año.

Como en la primera sesión, uno de los imputados admitió el robo del móvil de la joven, encontrado horas después tirado en el suelo en una zona situada a 500 metros del portal. El “robo con intimidaci­ón” que indica la fiscal, admitido por el acusado pero como hurto, sólo fue reconocido por primera vez en la primera jornada del juicio. Según fuentes judiciales, el acusado aseguró ayer que se debió a un “ataque de avaricia” e indicó que lo tiró “por miedo” tras ser identifica­dos por la policía en la plaza de toros después de correr. En el portal de los hechos, como destacó el juez, abandonaro­n dos tarjetas de memoria del teléfono y la funda.

Con respecto a la falta de consentimi­ento verbal de la joven puesto de manifiesto por la acusación, el letrado de tres de los imputados, Agustín Martínez Becerra, explicó ayer que “hay otras formas de consentir”, un argumento en el que han basado su declaració­n y defensa. Sin embargo, el abogado de la joven, Carlos Bacaicoa, fue contundent­e con las declaracio­nes hechas por los imputados desde septiembre de 2016: “Mienten como bellacos”.

Por otro lado, las conclusion­es del juicio se celebrarán finalmente los días 27 y 28 de noviembre y serán abiertos al público, aunque no se admitirá a la prensa la entrada de grabadoras ni teléfonos móviles. El lunes será el turno de la acusación y el martes, el de la defensa.

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JESUS DIGES / EFE Momento de la concentrac­ión de ayer ante el Palacio de Justicia de Navarra con el lema “Nosotras te creemos”, convocada por los colectivos feministas Lunes Lilas y Andrea

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