Puigdemont renuncia a la pensión de expresident
Carles Puigdemont no ha solicitado la pensión que corresponde a los expresidentes de la Generalitat –el plazo finalizó hace ya unos días– porque considera que él es aún el presidente legítimo de Catalunya. Esta es la respuesta al requerimiento de Cristóbal Montoro de que en diez días informara de si había reclamado la asignación mensual del 80% del sueldo que le corresponde por ley, como muestra, si lo hacía, de que acataba el artículo 155. Lo que sí hará es darse de alta para cobrar el sueldo base que, como diputado que también era, le corresponde durante los meses que transcurran hasta la constitución de la próxima legislatura. La pensión como expresident le daba derecho a percibir el 80% de los 120.000 euros anuales de sueldo –96.000 euros al año– durante cuatro años, mientras que el sueldo base como diputado supondrán 2.871,57 euros entre dos y tres meses. La renuncia a la pensión no supone renunciar al reconocimiento que le corresponde en función del cargo ocupado ni a pedir más adelante la oficina de expresident. “El Estado continúa siendo una máquina de humillar instituciones y ciudadanos”, lamentó Puigdemont. La misma estrategia es la que han adoptado Jordi Turull y Josep Rull, mientras que el vicepresident y el resto de consellers sí que se han acogido a cobrar las pensiones como exmiembros del Govern.