Adelantamientos furtivos
Los rebasamientos en la F-1 caen a la mitad en un año, a 21,8 por carrera
Míster Carey, Chase Carey, el mandamás de la F-1, tiene un problema: a su negocio le falta la sal de la vida. Los adelantamientos. Y de manera alarmante. Si el sucesor de Bernie Ecclestone se propuso, al relevar al magnate británico en septiembre del 2016, incrementar el espectáculo del gran circo, dentro y fuera de la pista, las primeras medidas técnicas para multiplicar la diversión en el asfalto han sido un fiasco. Los datos del balance del Mundial 2017 del detallado informe de Pirelli son reveladores: los adelantamientos cayeron a la mitad, 435 en total (21,8 por carrera), respecto al Mundial del 2016 (866, 41,2 por carrera).
Ya lo apuntó en estas páginas el expiloto Pedro de la Rosa, analista de guardia al comentar los cambios técnicos que introdujo la FIA este curso para buscar más espectáculo. “Será una F-1 más física, pero sin duda será más difícil adelantar porque los bólidos generarán más aire sucio”, pronosticó el barcelonés en febrero. Las 20 carreras del 2017 le han acabado dando la razón: los cambios técnicos (ruedas más anchas, incremento de la carga aerodinámica en un 30%, mayor velocidad en el paso por curva, más peso de los bólidos) han hecho que los coches sean más rápidos pasando por las curvas porque tienen más agarre (por ejemplo, en el curvone de Montmeló, la 3, se ha pasado de 212 km/h a 248 km/h), pero los adelantamientos han reculado de manera muy notoria.
Según el informe Pirelli, el número de adelantamientos totales de este 2017 (435) es inferior al del 2016 (866), e incluso al del 2015 (509). La firma italiana suministradora de neumáticos considera adelantamiento la maniobra que supone ganar una posición durante las vueltas de carrera (excluyendo la primera) y si se mantiene durante todo el giro. No se computan los cambios de posición debidos a problemas mecánicos o por los doblajes. Teniendo en cuenta este criterio, la carrera en seco con más adelantamientos fue la de Azerbaiyán, con 42, mientras que en el 2016, la más movida fue la de China, con 128... Tres veces menos. En el lado opuesto, la cita con menos rebasamientos fue la de Rusia –un verdadero tostón– con una sola maniobra, mientras que en el 2016 la menos generosa fue la de Hungría con 10. Por lo tanto, no es una cuestión de trazados exclusivamente (aunque algunos diseños no ayudan, precisamente).
La crisis rebasadora no ha modificado el ranking de los pilotos más espectaculares de la parrilla, que siguen siendo los de Red Bull por tercer año consecutivo. Este 2017, el australiano Daniel Ricciardo ha sido el piloto que ha completado más adelantamientos (43, con un máximo de 13 en una carrera, en Silverstone); en el 2016 lo fue su compañero Max Verstappen (78), y también en el 2015 (49). Aunque es igualmente notorio el bajón del holandés volador, que en este curso sólo ha realizado 22 maniobras. La sequía se hace alarmante viendo la involución de Red Bull, que precisamente es uno de los coches con mejor aerodinámica: en el 2016 sus pilotos sumaron 136 adelantamientos y este año se quedan en 65...
Por el contrario, los pilotos más duros para ser adelantados fueron Verstappen y Hamilton (2 veces a cada uno), y el equipo que fue menos adelantado, también Red Bull (11) y Ferrari (11), que superan respecto al 2016 a Mercedes (7), por el efecto Bottas.
En un segundo peldaño del podio de méritos de los adelantamientos figura el joven canadiense Lance Stroll (Williams), que en su primer año ha logrado distinguirse como el piloto que más posiciones ha ganado en la primera vuelta (36). Un honor que tuvo el año pasado Fernando Alonso (41).
El panorama no parece que vaya a cambiar excesivamente en el 2018, ya que la normativa técnica será la misma, con el mismo tipo de bólidos. La única novedad que puede incidir en los adelantamientos es la introducción de un neumático más blando todavía, el P Zero rosa hiperblando (por debajo del ultrablando púrpura), y con unos compuestos que serán un escalón más blando. “Esto debería ayudar a incrementar aún más la velocidad y el espectáculo”, comentaba Mario Isola, el responsable deportivo de Pirelli, que se mostraba entusiasmado por haber contribuido con sus gomas a tener “la F-1 más rápida de la historia”. La pole ha sido un promedio de 2,4 segundos más rápida, y las mejores vueltas de carrera, 2,9s más veloces. Pero, ¿de qué sirve correr más, que un bólido vaya a 270 y no a 240, si no se pueden adelantar? Es la clave de vuelta del espectáculo en la F-1.
EL MÁS ESPECTACULAR
Con 43 adelantamientos (dos por carrera), Daniel Ricciardo fue el piloto que más posiciones ganó