Iglesias aboga por un Govern que “una a gente que piensa distinto”
No sería el mejor eslogan para ganar unas elecciones en España, seguramente ni siquiera gustará en algunos sectores de su propio partido, pero Pablo Iglesias apostó ayer por que los comunes formen “un gobierno de reconciliación” en que incluya a los independentistas.
“Hace falta un gobierno de reconciliación, en el que haya gente que piense distinto, algunos independentistas y otros no” que pueda “desatrancar la situación política”, defendió el líder de Podemos. Horas antes, su diputada Carolina Bescansa había vuelto a cuestionar la apuesta por un referéndum pactado.
Iglesias protagonizó en Tarragona, en el barrio obrero de Bonavista, el primer mitin en que participa en esta campaña. Ante unas 500 personas, fue el más multitudinario de Catalunya En Comú-Podem en una campaña muy deshinchada. Qué lejos queda la efervescencia morada en las elecciones del 2015, cuando Iglesias se instaló en Barcelona para la contienda.
El líder de Podemos admitió que es una “campaña complicada” para los suyos, en que “todo está dominado por los sentimientos”. Y si tendió la mano a los independentistas, también les azotó: “Prometer lo que no se puede cumplir es estafar”, lanzó. También les acusó de alimentar una imagen caricaturesca y negativa de España. “España no es charanga y pandereta, ni el a por ellos”, dijo. Los sondeos apuntan una a una gran bolsa de indecisos que dudan entre ERC y CatComú, e Iglesias echó el anzuelo. Criticó a Felipe VI por hacer “lo que no hizo su padre, saltarse sus atribuciones constitucionales y obedecer a órdenes políticas”. También dijo que es “vergonzoso que haya presos –sin adjetivos– en este país” y condenó la intervención de la autonomía catalana, pero trató de convencer a esos votantes de que la solución “no pasa por la independencia sino por echar al Partido Popular”.
De Miquel Iceta, con quien tendrán que pactar los comunes si quieren este tripartito por el
Para el líder de Podemos, “la solución no pasa por la independencia, sino por echar al PP”
que cada vez apuestan más abiertamente, dijo que “el problema no es que baile, es que lo haga al son de Cs y PP” y le preguntó “cómo se pueden hacer políticas progresistas” con ellos.
Iglesias apeló a “la gente “harta del monotema, que sabe que las banderas no llenan neveras”, y presentó la papeleta de CatComú como una alternativa a los dos bloques que piden un “voto de venganza”. Xavier Domènech, el candidato de CatComú, se dirigió a los indecisos. “Nosotros no mentimos. Somos honrados, no jugamos a la ruleta rusa con la gente”, les dijo.