Más morbo imposible
Neymar y Mbappé, dos frutas prohibidas, amenazan al Madrid
Al Madrid le podía caer el United y volver a encontrarse con Mourinho, maestro de la provocación capaz de renegar de su pasado si con eso saca un poco de ventaja. Pero había algo más excitante. El actual campeón podía verse las caras con el City, quizás el conjunto más en forma del continente y que dirige Guardiola, en las antípodas de los blancos por su ideario –futbolístico e incluso político–. Pero existía un cruce todavía más cruel, más perverso. No hay más morbo que ver jugar a Neymar júnior y Kylian Mbappé en el Bernabeu... con otra camiseta. Con la del PSG.
Pocos, muy pocos futbolistas, han dicho que no al Real Madrid. Si el presidente era Florentino Pérez entonces aún se reduce más el grupo. Se pueden contar con los dedos de una mano. Pues ni con la estrella brasileña ni con la joya francesa se salió Pérez con la suya.
Ambos le dieron calabazas después de ser objeto de deseo público blanco. Ambos, por edad, eran los sucesores ideales para Cristiano Ronaldo. Pero con cuatro años de diferencia, tanto Neymar como Mbappé rechazaron al Madrid para elegir los brazos de otro. En un mundo tan volátil como el del fútbol nunca se puede decir de este agua no beberé y quizás algún día alguno termine de blanco, pero ser eliminado por ellos sería un dardo al orgullo de Florentino Pérez.
Fue el 25 de mayo del 2013 cuando Neymar comunicó en Instagram que se había decidido por el Barça. El club blaugrana lo tenía apalabrado pero el Madrid realizó un último intento a la desesperada. Le ofreció pagar la compensación al Barcelona, una casa en La Mora- leja, 60 millones al padre, 10 millones por seis temporadas para él y le cedía el 70% de los derechos de imagen. Y ni así le hizo cambiar su opinión de jugar en el Camp Nou junto a Messi.
Este verano la historia se repitió con Mbappé, la sensación del Mónaco. Ni Zidane, ídolo y campeón del mundo con les bleus, le pudo convencer. Mbappé prefirió hacer historia en París. “No puedo negar que la idea de compartir delantera con Neymar me seduce”, dijo el adolescente.
Por 402 millones, el PSG juntó a los dos puntas que quería Florentino y se le resistieron. Neymar ya ha marcado 15 goles. Mbappé ha celebrado otros 10. Y hay que sumar las 23 dianas de Cavani. “Cada verano ellos han contratado futbolistas de enorme nivel. Han ganado mucho con Neymar y Mbappé. Son dos jugadores que están aportando mucho al fútbol. Uno muy joven y el otro ya consagrado”, reflexionó Emilio Butragueño.
No hay nada más motivador para un nuevo rico con ansias de trascender que el equipo más laureado y el que más se identifica con la Champions. El Madrid se ha visto penalizado por ser segundo. Su castigo es que si quiere aspirar a la duodécima tendrá que deshacerse del PSG, que siempre le eliminó: en la UEFA de 1992-93 y en la Recopa 1993-94. Además el partido de ida se jugará el 14 de febrero. El día de San Valentín inspira al PSG, ya que la temporada pasada destrozó al Barcelona por 4-0.
Nadie parecía estar contento con el cruce hasta que entró Unai Emery en la sala de prensa. “No creo que hayamos tenido el peor sorteo posible. Tenemos el nivel para ganarles. Mi primera sensación ha sido ponerme contento. Lo afrontamos con optimismo”, dijo el técnico de Hondarribia, que debería saber que el duelo de vuelta es cinco días antes del cumpleaños de la hermana de Neymar. El futbolista ya viajó esta semana a Brasil por un problema personal. “Estamos en contacto y en tres o cuatro días espero que venga”.
El resto de opiniones fueron más comedidas. “Considero que es un poco pronto para este cruce”, lamentó Butragueño. “Es una final anticipada”, sentenció el lateral Meunier. “Se verán momentos mágicos”, vaticinó Al Jelaifi, conseguidor de las frutas prohibidas.