Villar culpará al Gobierno si España se cae del Mundial
Villar asegura que el Gobierno será el único culpable si España no va al Mundial
Ángel María Villar rompió su silencio y ofreció su primera rueda de prensa en treinta años para anunciar que no tira la toalla, que es víctima de un linchamiento porque no es culpable de ningún delito y que todavía se considera el legítimo presidente de la Real Federación Española de Fútbol. En una comparecencia multitudinaria, tensa y cargada de descalificaciones, Villar negó tener nada que ver con la carta de la FIFA por la que dicho organismo amenaza a España con dejarla sin ir al Mundial de Rusia de seguir las injerencias del Gobierno en la Federación. “Prefiero que España vaya al Mundial pero, si no va, el único culpable es el Gobierno por no cumplir con la normativa”, comentó. El Consejo Superior de Deportes (CSD) inhabilitó a Villar por un año el pasado 25 de julio. La medida llegó tras el encausamiento de Villar y varios de sus directivos por presuntos delitos de corrupción, el llamado caso Soule.
El Consejo de Estado ha de decidir en torno al 15 de enero si revoca todo el último proceso electoral y se convocan nuevas elecciones a la presidencia, como pretende el CSD. Mientras tanto, y con independencia de dicha resolución, el martes 16 de enero la Federación tiene previsto votar la moción de censura contra Villar presentada por Luis Rubiales, expresidente de la AFE (sindicato de jugadores) y hasta hace muy poco el considerado delfín de Villar.
En su comparecencia de hora y cuarenta minutos Villar no hizo la menor autocrítica a sus 29 años de gestión y tiró con bala contra todos. A su juicio, detrás del complot que ha terminado con sus huesos en la cárcel durante doce días están sus grandes enemigos de los últimos tiempos: Miguel Cardenal, expresidente del CSD; su sucesor, José Ramón Lete; Javier Tebas, el presidente de la Liga y reconocido enemigo personal suyo; Jorge Pérez, ex secretario general y último rival electoral; los jueces y fiscales “a los que se ha utilizado”; la prensa y el Gobierno en pleno. Villar hasta se permitió ironizar con el presidente Mariano Rajoy: “Como ha demostrado que sabe de todo y es un hombre muy capaz , si vuelvo a ser presidente nombraré a Rajoy auxiliar de Julen Lopetegui y así ganará más que como presidente del Gobierno”.
Para Villar, la única solución posible a este gigantesco enredo en el que vive envuelta la Federación no es en ningún caso su dimisión para que entre aire fresco. “La Federación se adscribió a la FIFA y a la UEFA de forma voluntaria (remarcó lo de voluntaria varias veces) y ahora lo único que cabe es cumplir con los estatutos; que no haya injerencias del Gobierno. No se trata de que yo dimita o no. Pero pasa que algunos quieren mi cabeza colgada como la de los toros y los ciervos. Me siento un leproso. Me han arrojado al barro a mí y a mi familia. Aquí se ha dado un golpe de Estado por parte de unos linchadores. Basta de linchadores”.
Preguntado sobre por qué no había dimitido de la presidencia de la Federación Española como sí lo había hecho de las vicepresidencias de la UEFA y de la FIFA, comentó: “La presidencia de la Federación se defiende mejor en activo y espero que todo esto se aclare porque yo no he hecho nada malo. Somos inocentes. Y lo defenderé aquí y ante los tribunales internacionales. Estoy seguro de que no voy a volver a la cárcel”.
Villar tuvo unas palabras dolidas para con Rubiales. “Como presidente de la AFE me ha distinguido dos veces. Me apoyó en las últimas elecciones y a los tres días de estar en la cárcel, con el sumario secreto, ya pedía mi dimisión...”.
Tampoco se mostró muy afable con Juan Luis Larrea, su sucesor y quien fue su tesorero en la junta directiva durante casi treinta años: “Ustedes le llaman presidente, pero es un directivo con funciones de presidente, como lo era yo de la UEFA en el año en que estuvo suspendido Michel Platini. Le considero un hombre capaz. Pero el presidente es el que es elegido en las urnas y ese hombre en España soy yo. Él fue designado simplemente al ser el más viejo de la junta directiva”. Larrea ahora no le hace ascos a agotar toda la legislatura en el cargo.
Pese a la vehemencia de su defensa, Villar está solo. No ha recibido el respaldo de ningún jugador de la selección, aunque sí una mención cariñosa de Lopetegui tras el España-Italia. Nadie de la Federación ni de ningún organismo público o privado le acompañó ayer. En el estrado en el que se presentó ante los medios sólo estaba acompañado por un amigo.