Dos grandes actores para dos grandes leyendas
Existe en Hollywood una tendencia cada vez más extendida a poner caras de actores y actrices a los personajes de las novelas con mayor éxito de ventas. La interpretación cinematográfica de los colosos del periodismo norteamericano Ben Bradlee (1921-2014), Carl Bernstein y Bob Woodward ya había vivido esa especie de juego antes del estreno de Todos los hombres del presidente. Y si en aquella ocasión los tres personajes fueron magistralmente interpretados por Jason Robards, Dustin Hofffman y Robert Redford, ¿quien podía interpretar ahora a Katharine Graham mejor que Meryl Streep? Graham (1917-2001), que incomprensiblemente fue ninguneada y no aparecía en el reparto de personajes del filme de Pakula, tiene, ahora sí, un papel primordial en The Post. El director explicó que se había ceñido al libro de Bernstein y Woodward, en el que ella aparece en muy contadas ocasiones. Esto contrasta con la época actual, en la que una omisión de este tipo sobre el papel de una mujer esencial en la historia no habría pasado desapercibida. En The Post, Streep interpreta a esta mujer de agallas que lideró el The Washington Post en un mundo en el que las mujeres apenas tenían cabida, y que ganó un Pulitzer en 1998 por su libro Una historia personal. Sobre cómo alcancé la cima del periodismo en un mundo de hombres. Y quién mejor para interpretar a un héroe americano que Tom Hanks. Nadie mejor que Hanks para ponerse en los pantalones de un hombre justo y honrado cuyo único consejo a sus reporteros fue: “Escribid lo que tengáis que escribir, pero no cometáis errores”.