La Vanguardia

Tres meses en el aeropuerto de Bangkok en espera de asilo en España

- BANGKOK Redacción y Efe

Una familia de Zimbabue que se niega a volver a su país por miedo a represalia­s lleva tres meses varada en el aeropuerto internacio­nal Suvarnabhu­mi de Bangkok, tras tratar de volar sin éxito a España para solicitar asilo político. El viceportav­oz de la Oficina de Inmigració­n de Tailandia, el coronel Cherngron Rimphadee, confirmó que los cuatro adultos y cuatro niños que forman la familia han sido entrevista­dos por el Alto Comisionad­o de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). Representa­ntes de este organismo en España desconocen que exista tal solicitud de asilo.

En un comunicado, la Oficina de Inmigració­n identifica con nombre y apellidos al cabeza de la familia, a pesar de que esta persona y sus familiares dejaron Zimbabue por considerar que corrían peligro. El grupo está formado por cuatro adultos y cuatro menores, de 2, 6, 7 y 11 años.

Las autoridade­s tailandesa­s indicaron que la familia se encuentra bajo el cuidado de Ukraine Internatio­nal Airlines (UIA), la aerolínea que utilizaron dos veces para intentar viajar a Barcelona. “De momento, están bajo el cuidado de la aerolínea y no están retenidos en la sala de detención del aeropuerto como otros extranjero­s a quienes se les niegan la entrada a Tailandia”, precisa el comunicado.

La familia no ha podido abandonar la terminal de salidas del aeropuerto en los últimos tres meses

La familia con 4 niños salió de Zimbabue en mayo y ha intentado dos veces llegar a Barcelona vía Kíev

debido a que expiraron sus visados de turista en Tailandia. La Policía de Inmigració­n descubrió que los visados habían caducado cuando el 23 de octubre pasado compraron billetes en UIA con destino a Barcelona vía Kíev, pero no pudieron embarcar al carecer de visado para entrar en España. El 7 de noviembre consiguier­on subir a otro avión de UIA y esta vez llegaron a Kiev, pero allí les obligaron a volver a Bangkok por la misma razón.

Según explican técnicos de Acnur, cuando se produce un traslado de personas sin los correspond­ientes permisos, es la compañía que realiza el transporte y ha permitido el viaje sin visado la responsabl­e de su manutenció­n hasta que se resuelva el caso.

Una situación como esta podría resolverse si la familia solicitara asilo político en la embajada española del país al que han llegado, hay una ley que así lo contempla desde el 2009. El problema es que nunca se desarrolló el reglamento, así que no se sabe muy bien cómo hacerlo.

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